Madrid, 24 ene (EFECOM).- Las reservas del mercado británico para viajar a España en verano se mantienen relativamente estables y están en cifras positivas, con crecimientos en algunos destinos y bajadas en otros, según el consejero de Turismo en Londres, Javier Piñanes.
En una conferencia sobre el efecto del "bréxit" en el turismo español, organizada por Turespaña en Fitur, Piñanes ha explicado que la caída que se produjo en la afluencia británica a España en 2018 se debe a otros factores, además de la incertidumbre generada por la salida del Reino Unido de la Unión Europa (UE) y la devaluación de la libra respecto al euro.
A su juicio, han incidido también la quiebra de la aerolínea Monarch Airlines, que traía a 1,5 millones de personas a España, y la recuperación de destinos competidores como Egipto o Turquía, aunque el mercado británico está sobreviviendo muy bien a este acumulo de circunstancias adversas, ha recalcado.
Además, está cambiando el tipo de turista británico que visita España, alejándose el consumidor de productos tradicionales y aumentando el que busca otros tipos de turismo como el cultural o el gastronómico, lo que supone mayores ingresos para los destinos.
Piñanes ha explicado que va a haber un período transitorio, más largo o menos, en función del escenario definitivo de "bréxit", tras la fecha de la salida del Reino Unido prevista para el próximo 29 de marzo, en el que las cosas seguirán exactamente igual en cuanto a la tarjeta sanitaria o al tráfico aéreo, entre otros aspectos, lo que permite estar relativamente tranquilos.
El subdirector general de Asuntos Institucionales del Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Raúl Fuentes, ha recogido este mensaje tranquilizador, pero "hasta cierto punto", señalando que hay que adaptarse a un "bréxit" sin acuerdo porque va a tener un impacto muy importante en el mercado británico, principal emisor de turistas para España.
Tenemos que prepararnos ante la posible bajada de la libra, la contracción de la economía británica, una serie de modificaciones reglamentarias y restricciones en la libre circulación de las personas.
En estos momentos, todos los diferentes escenarios de "bréxit" están abiertos, incluida la marcha atrás y una salida sin acuerdo, que sería la peor posibilidad y para la que la Administración establece un plan de contingencia, con el objetivo de amortiguar su efecto.
La UE ha establecido un paquete de medidas en materia de visados turísticos, aduanas o el transporte aéreo.
El real decreto que el Gobierno de España prevé aprobar en febrero recoge medidas que no regula la UE y se dirige a facilitar la vida de los británicos en España y la de los españoles en el Reino Unido, además de una serie de disposiciones en materia financiera y donaciones presupuestarias y logísticas.
La directora gerente de Promotur Turismo de Canarias, María Méndez, ha advertido de que el "bréxit" puede llevar a que los viajes a España les cuesten más a los británicos, debido a la subida de las tasas aeroportuarias, al ser más altas en vuelos de terceros países, o la devaluación de la libra.