Liberbank obtuvo un beneficio neto de 110 millones de euros en 2018, frente a los 259 millones de pérdidas de un año antes, gracias al dinamismo de la actividad comercial y la reducción de gastos, que permitieron la mejora de márgenes.
La entidad, que ultima su fusión con Unicaja Banco, continúo con el saneamiento de su balance, lo que le permitió que la tasa de morosidad cayera del 5 % previsto, hasta el 4,94%, a cierre del año, tras desprenderse de 900 millones en adjudicados.
A pesar de los bajos tipos de interés, el margen de intereses del banco creció un 11,5%, hasta 453 millones, con una aportación de 117 millones en el último trimestre del año, la mayor en los últimos tres años, destaca el banco en un comunicado enviado a la CNMV.
Los ingresos netos por comisiones crecieron un 0,9%, hasta 183 millones, que unido al incremento del margen de intereses compensaron la caída del 62,7% del resultado por operaciones financieras, con lo que el margen bruto se redujo apenas un 0,9%, hasta 640 millones.
El margen de explotación creció un 10,7%, hasta 247 millones, gracias a la continuidad de la política de contención de gastos, que se redujeron un 8 %, hasta 357 millones.