Madrid, 5 feb (EFECOM).- La ministra de Economía y Empresa, Nadia Calviño, cree que hay margen para negociar los Presupuestos, dice sentirse "optimista", y descarta que sea "momento para especular" sobre si su rechazo en el Parlamento implicaría la convocatoria de elecciones.
En declaraciones a la prensa tras clausurar una jornada sobre brecha de género en el ámbito laboral, organizada por la consultora ATKearny, Calviño se ha referido así al anuncio por parte de ERC de que este martes registraría una enmienda de devolución a los Presupuestos y la posibilidad de que el PDeCAT haga lo mismo antes de que el viernes termine el plazo.
Según ha apuntado, los partidos políticos están "al principio de una negociación" y cada parte "tendrá que tomar sus propias decisiones".
En su opinión, las cuentas presentadas por el Gobierno son "muy equilibradas" desde el punto de vista de la disciplina presupuestaria, con reducciones del déficit y de la deuda, y de una gran ambición de políticas sociales, que reflejan "lo que quiere una mayoría de la población".
Por ello, considera que los partidos políticos tendrán "muy difícil" explicar por qué no las apoyan y por qué ni siquiera están dispuestos a que se debatan en la sede parlamentaria sobre las cosas que "realmente importan a los ciudadanos", como las pensiones, la política social o el sistema impositivo.
Aunque si no se lograran sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado para 2019 "puede haber un riesgo de que se acorte la legislatura", tal y como ha apuntado en el pasado el presidente del Gobierno, la ministra considera que "no es el momento de especular" al respecto.
Respecto a los datos sobre empleo conocidos el lunes, la titular de Economía ha recordado que enero suele ser un mes "malo" para el mercado laboral y que los de este año "no marcan ninguna tendencia distinta" a otros años y "están dentro de lo que se considera previsible".
En términos interanuales, el aumento de las afiliaciones está en el entorno del 3 % y el paro se ha reducido entre el 5,5 y el 6 %, un ritmo similar al logrado en 2018, un año "particularmente positivo" para el mercado laboral, por lo que "no vemos ningún impacto de la subida del salario mínimo interprofesional (SMI)", que acaba de entrar en vigor.
Calviño coincide así con el secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, que ayer aseguraba que no existe ninguna correspondencia entre el incremento del SMI y la pérdida "habitual" de afiliados de enero, que -por ejemplo- es similar a la registrada en el mismo mes de 2016, año el salario mínimo subió un 1 %.