La cadena de supermercados DIA ha comenzado la primera fase de su nuevo plan estratégico con una bajada de precio en sus productos de marca blanca en España, con la que pretende recuperar cuota de mercado después de un 2018 de fuertes caídas en ventas.
Así lo ha apuntado hoy en declaraciones a Efe un portavoz de la compañía, que ha explicado que ya se ha procedido a abaratar 200 referencias de diferentes categorías.
Además, en caso de tener éxito está previsto activar una segunda fase -durante el primer semestre de 2019- en la que se bajarán los precios de más productos de su propia marca.
La empresa está inmersa en una grave crisis en el plano financiero desde hace meses y con este nuevo proyecto -diseñado por su actual consejo de administración- pretende mejorar sus datos operativos con un aumento de las ventas para recuperar así cuota de mercado en España.
El principal cambio de este plan pasa por dejar atrás las promociones que cambiaban semanalmente y sustituirlas por una rebaja de precios prolongada en el tiempo y centrada en su marca blanca, la cual también se quiere potenciar.
De hecho, el documento que resume las líneas estratégicas a seguir para el período 2018-2023 -presentado el pasado viernes públicamente- ya especificaba esta apuesta por "invertir en los precios mientras se reducen las promociones".
Fuentes del grupo han señalado que hasta ahora la gran cantidad de promociones que variaban semanalmente añadían complejidad a su red de 3.474 supermercados en España -excluidas las enseñas Clarel y Max Descuento, que están a la venta-, y que el objetivo es "simplificar" y mejorar la eficiencia.
Fuentes de DIA han reconocido, asimismo, que el proceso de revisión realizado en el seno de la firma ha detectado también que la percepción del consumidor sobre los precios que ofrece la cadena ha empeorado respecto a otros competidores, por lo que con este abaratamiento en referencias de su marca blanca esperan recuperar parte del terreno perdido entre sus clientes.
El grupo vivió en 2018 el peor año de su historia y acabó el ejercicio con unas pérdidas de 352,6 millones de euros.
Además, ya ha anunciado un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a un máximo de 2.100 trabajadores en España y el cierre de 300 tiendas en el país.