San Sebastián, 14 feb (EFECOM).- Laboral Kutxa logró en 2018 un beneficio neto de 133,7 millones de euros, un 10,06 % más que en el ejercicio anterior, pese al estancamiento de los tipos de interés, que "ha condicionado severamente las cuentas de resultados y la rentabilidad de las entidades financieras".
La cooperativa de crédito de la Corporación Mondragón ha hecho públicos este jueves los resultados del pasado ejercicio, en el que incrementó un 10,06 % su beneficio gracias a "una intensa actividad comercial" traducida en "aumentos notables de las formalizaciones de nuevos créditos, tanto en el ámbito de los particulares como en el de las empresas".
Las hipotecas han aumentado un 18,7 % durante 2018, mientras que los créditos a las pymes han crecido en un 18,8 % y los préstamos para autónomos y los pequeños negocios se han incrementado en un 14,5 %.
La cooperativa ha contenido el margen de intereses en 246,47 millones de euros, lo que significa una reducción del 0,35 % respecto a 2017, mientras que ha ingresado 101,52 millones de euros procedentes de comisiones.
Los gastos de administración han descendido en un 2,29 % y también ha reducido la dotación a coberturas para deterioros e insolvencias, a las que ha dedicado 11,40 millones, después de haber disminuido en un 11,6 % su cartera de activos dudosos.
La tasa de morosidad se ha situado en el 4,51 % en 2018, sin necesidad de realizar operaciones de venta de paquetes de activos problemáticos, ha precisado la caja.
Presenta asimismo una "holgada posición de liquidez", con una ratio LTD (Loans To Deposits) del 73,70 % y una liquidez a corto plazo LCR (Liquidity Coverage Ratio) situada en el 541 %, "cuando la exigencia a partir del 1 de enero de 2018 se estableció en el 100 %.
En cuanto a la solvencia, Laboral Kutxa presenta un ratio de 18,76 %, más de 7 puntos por encima de la exigida por el supervisor.
Los recursos intermediados por la cooperativa de crédito ascienden a 21.841 millones de euros, lo que supone un incremento del 3,9 %, ha indicado la caja, que ha detallado que los recursos dentro de balance, como cuentas a la vista, cuentas de ahorro o depósitos a plazo han aumentado un 4,3 %.
El conjunto de la inversión crediticia se sitúa en 13.196 millones de euros, un 0,9 % por debajo del saldo registrado en diciembre de 2017.
En el ámbito de las familias, el volumen de crédito hipotecario ha aumentado un 18,7 %, mientras que los préstamos para consumo doméstico se han incrementado un 6 % respecto a 2017.
Las empresas con volúmenes de facturación por debajo de 100 millones de euros han incrementado la demanda de financiación en un 18,8 % y los pequeños negocios y autónomos lo han hecho en un 14,5 %.