El grupo francés de componentes eléctricos Schneider Electric anunció este jueves que en 2018 tuvo un beneficio neto de 2.334 millones de euros, una cifra que supera sus expectativas y que le supuso un avance del 8,6 % respecto al año anterior.
La empresa precisó en un comunicado que su resultado bruto de explotación (ebitda) llegó a los 3.874 millones, un 6,1 % más, mientras que su facturación aumentó un 3,9 %, hasta los 25.720 millones.
Por su parte, su flujo libre de caja descendió un 6,7 % el año pasado respecto a 2017.
El presidente director general de la firma, Jean-Pascal Tricoire, dijo que está satisfecho con estos resultados, en un año en el que consideró que la firma ha acelerado la ejecución de su estrategia empresarial, con más servicios y herramientas.