Nueva York, 15 feb (EFECOM).- La "emergencia nacional" declarada este viernes por el presidente Donald Trump para financiar la construcción de un muro fronterizo con México no ha inquietado a Wall Street, que cerró con notables ganancias, impulsado por el optimismo hacia las negociaciones comerciales entre EE. UU. y China.
El parqué neoyorquino ha concluido su octava semana consecutiva en verde mientras parecen despejarse los miedos a un eventual choque comercial entre Washington y Pekín, que esta semana concluyeron su tercera ronda de negociaciones con "avances importantes".
Los encuentros terminaron con una reunión entre el presidente chino, Xi Jinping, el representante estadounidense de Comercio Exterior, Robert Lighthizer, y el secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin, en la que según el máximo mandatario chino se han hecho "grandes progresos".
Para el director de los fondos de inversión Icon Funds, Craig Callahan, los mercados están volviendo a actuar de manera racional "recuperándose de las ventas irracionales del otoño pasado", cuando la volatilidad se impuso en el parqué.
En declaraciones al canal de televisión CNBC Callahan indicó que el miedo que estalló entonces respondía al temor a una guerra comercial entre China y Estados Unidos, a que la ralentización de la economía china se extendiera a todo el mundo y a la política comercial de la Reserva Federal.
"Creemos que lo que está pasando es simplemente que esos miedos se están enterrando y que el mercado vuelve a ser racional", agregó.
Los tres indicadores se recuperaron hoy, después de que este jueves, los datos sobre la caída de las ventas minoristas del mes de diciembre, la mayor caída en una década, arrastraran a los tres principales indicadores bursátiles a los número rojos.
Hoy, sin embargo, el Dow Jones de Industriales subió un 1,74 % hasta 25.883,25 enteros, mientras que el índice S&P 500 ascendió un 1,09 %, hasta 2.775,60, y el índice compuesto del mercado Nasdaq, repuntó un 0,60 % hasta los 7.472,41.
En este contexto de optimismo, la decisión de Donald Trump, con la que pretende reunir casi 8.000 millones de dólares para erigir unos 376 kilómetros de una barrera fronteriza, no ha aguado la fiesta al parqué.