Tokio/Londres, 19 feb (EFECOM).- El sector del motor del Reino Unido, uno de los más importantes del país, sufrió este martes un duro golpe con el anuncio de la firma japonesa Honda Motor de cerrar en 2021 su planta de Swindon, lo que supondrá el recorte de unos 3.500 empleos.
Aunque Honda ha indicado que la decisión no está directamente relacionada con el "brexit", la noticia se conoció en momentos de profunda incertidumbre entre las empresas por los términos de la retirada del Reino Unido de la Unión Europea (UE) este 29 de marzo.
El cierre afectará, además, a toda una cadena de suministros y a una comunidad que depende de la planta, que ocupa una extensión de 150 hectáreas en Swindon, ciudad con una población de más de 180.000 personas en el condado de Wiltshire (suroeste de Inglaterra).
La planta empezó a operar en 1989 y representa aproximadamente el 10 por ciento de la producción total de automóviles del país.
El presidente y consejero delegado de la compañía, Takahiro Hachigo, confirmó hoy en rueda de prensa en Tokio esta decisión que había sido adelantada ayer por medios británicos.
En la planta se fabrican actualmente unos 150.000 vehículos al año, la mayoría de ellos del popular modelo Honda Civic, y el 90 por ciento de los cuales se exportan a Europa y Estados Unidos.
Hachigo afirmó que el cierre "no está relacionado con el 'brexit'", sino que tiene que ver con los planes de reestructuración global de su red de fábricas para incrementar la producción de vehículos eléctricos, durante la rueda de prensa celebrada en Tokio.
La de Swindon es la única planta de producción de automóviles en Europa de Honda Motor, que tiene asimismo su sede para este continente en Bracknell (oeste de Londres), la cual no se verá afectada en principio por la decisión anunciada hoy.
La noticia se produce en el mismo mes en el que ha entrado en vigor el acuerdo comercial entre Japón y la UE, que permitirá que el bloque comunitario levante en 2027 sus aranceles del 10 por ciento sobre los automóviles nipones importados.
La decisión de cerrarla llega después de que el mes pasado Honda anunciara que detendrá su producción en el Reino Unido durante seis días en abril para afrontar los posibles trastornos logísticos que puede provocar el "divorcio" británico del club comunitario.
El Gobierno británico sigue intentando renegociar el acuerdo del "brexit" al que llegó con Bruselas, después de que el Parlamento británico rechazara el texto el pasado enero.
Tras conocerse la noticia del cierre, el ministro británico de Empresas, Greg Clark, calificó de "devastadora" la decisión, pero subrayó que se trata de una medida comercial.
"Honda ha anunciado, como parte de una reestructuración global, planes para cerrar su planta de Swindon en 2021, y a cambio fabricar y exportar el nuevo Modelo Civil a Europa desde Japón. Como ha dicho Honda, esta es una decisión comercial basada en unos cambios sin precedentes en el mercado global", dijo Clark en un comunicado.
El ministro agregó que trabajará con los diputados de la zona afectada y con líderes empresariales, así como con los sindicatos, para asegurar que los afectados tengan nuevo empleo.
"El sector del motor -dijo- atraviesa por una rápida transición hacia nuevas tecnologías. El Reino Unido es uno de los líderes en el desarrollo de estas tecnologías, así que es profundamente decepcionante que esta decisión haya sido tomada ahora".
La secretaria general de los Sindicatos Británicos (TUC, siglas en inglés), Frances O'Grady, dijo hoy que se trata de un "golpe devastador" para los trabajadores y el sector industrial.
O'Grady criticó a la primera ministra británica, Theresa May, por negarse a descartar una salida de la UE sin acuerdo y le pidió que ponga fin a esta incertidumbre que afecta a los empleos.
El diputado conservador por Swindon, Justin Tomlinson, dijo hoy que trabajará con los sindicatos para ayudar a los empleados afectados por la medida, que calificó también de "devastadora".
El vicepresidente de Honda Europa, Ian Howells, dijo hoy a la BBC que la decisión no está relacionada con el "brexit", sino con unos cambios globales ante los que "debemos responder ahora".