Nueva Delhi, 20 feb (EFECOM).- La XII edición de la feria de aviación Aero India comenzó hoy en Bangalore (sur) con la presencia de más de 800 compañías del sector, exhibiciones de los últimos aviones de combate, demostraciones acrobáticas, seminarios y hasta una olimpiada de drones.
En la inauguración del evento, la ministra india de Defensa, Nirmala Sitharaman, afirmó que en la cita bienal de este año, que pretende poner a la India en el "mapa global" y convertirse en una "pista para mil millones de oportunidades", participan unas 600 empresas indias y otras 200 extranjeras.
Ante ministros y viceministros de diversos países, Sitharaman destacó el "extraordinario" progreso del país asiático en los sectores de la aviación civil y de defensa, algo plausible en las cabinas manufacturadas para el alemán Dornier o las CH-47 Pylon para la estadounidense Boeing.
Éstas son sólo algunas de las piezas en exhibición en Bangalore desde hoy y hasta el 5 de febrero.
Uno de los platos fuertes será el Pabellón Francés, coordinado por la Asociación Francesa de Industrias Aeroespaciales (Gifas) y en el que estarán presentes gigantes del país europeo como Dassault o Rafale, según información proporcionada hoy a Efe por el portavoz de Gifas Christophe Robin.
En la cita, los franceses presentarán una aeronave Dassault Falcon 2000s, un Airbus A330-900 y un Airbus C295, además de helicópteros Airbus H135 y H145.
La India, uno de los mayores importadores de armas del mundo, está promocionando la manufactura en su territorio en el marco de la iniciativa "Make in India" o "Fabrica en la India", el programa estrella del primer ministro, Narendra Modi.
Poco a poco, ha comenzado a exportar productos de defensa como los aviones utilitarios Dornier Do-228 enviados a Mauricio; los helicópteros ALH Dhruv a Nepal, Maldivas y Mauricio; los helicópteros Cheetal a Afganistán; los radares exportados a Rusia o las avionetas Airvan 8 de Botsuana.
Entre 2014 y el pasado octubre se firmaron 150 contratos con compañías indias para la compra de material de defensa para las Fuerzas Armadas por valor de casi 1,3 billones de rupias (unos 17.900 millones de dólares), según datos del Gobierno indio.