La entidad financiera austríaca Erste Group, participada por la española CaixaBank, informó este jueves de que en 2018 obtuvo un beneficio neto récord de 1.793 millones de euros, un 36 % más que el ejercicio anterior.
Erste Group -el segundo mayor banco de Austria- está participado en un 9,92 % por CaixaBank y está presente, además de en el mercado local, en otros seis países de Europa Central y Oriental.
Este es el mejor resultado en los 200 años de historia de la entidad, que apuntó que las ganancias operativas pueden seguir aumentando en 2019 debido a la buena marcha económica de los países del Este en los que está presente y la mayor demanda de créditos.
"Estamos presentes en la región más dinámica económicamente de la Unión Europea", explicó el presidente ejecutivo de la entidad, Andreas Treichl, en un comunicado.
"Las bajas tasas de desempleo, el aumento de los salarios reales y el crecimiento de la competitividad han llevado a los empresarios de nuestra región a asumir más riesgos e invertir", agregó.
Ante la sólida situación económica en países como Austria, República Checa, Eslovaquia y Rumanía, Erste Group espera que los ingresos netos por intereses aumente en 2019, después de que en 2018 hubieran aumentado un 5,3 % hasta 4.580 millones.
La buena marcha económica también ha reducido la cartera de créditos catalogados de problemáticos hasta el 3,2 %, desde el 4 % de 2017.
Entre los aspectos que pueden influir de forma negativa en el resultado operativo de 2019, la entidad señala la introducción de un impuesto a la banca en Rumanía.
Desde enero de 2019, Rumanía requiere que los bancos paguen un impuesto trimestral sobre sus activos financieros como parte de una reforma del gobierno socialdemócrata para aumentar los ingresos del Estado.