Mal día en Wall Street, pero no "infernal" como en 2009
Nueva York, 6 mar (EFECOM).- Wall Street tuvo este miércoles un mal día, y ya van tres seguidos, pero aún así estuvo lejos del 6 de marzo "infernal" que vivió hace exactamente diez años, cuando el índice S&P 500 tocó fondo durante la crisis financiera y bajó a unos demoníacos 666 puntos durante la jornada.
Al sonar la campana en la Bolsa de Nueva York, este amplio selectivo cerró la sesión situándose en los 2.771,45 puntos, cuatro veces por encima de aquella cifra, aunque eso implicó un retroceso del 0,65 % respecto a la jornada anterior.
El Dow Jones de Industriales perdió un 0,52 %, y el Nasdaq, que aglutina a las principales tecnológicas, un 0,93 %.
Esta semana todavía no ha visto ganancias, en un "impasse" a la espera de que Washington anuncie avances en la negociación comercial con Pekín para solucionar su conflicto arancelario, entre versiones de que ambas potencias ultiman ya los detalles.
Así, a falta de novedades, los inversores estuvieron digiriendo datos económicos que les hicieron virar hacia el pesimismo, y más cuando venían de la Reserva Federal (Fed), cuyo ajuste monetario ha sido motivo de preocupación en los últimos meses.
La Fed divulgó en su "libro beige", como se conoce a su informe sobre la economía, que constata una ralentización de la actividad a consecuencia del cierre parcial del Gobierno a comienzos de año, de la debilidad de la demanda global y de los mayores costes debido a los aranceles impuestos por EE.UU.
La mayoría de distritos en los que se divide el país arrojaron datos positivos, con aumentos salariales y escasez de trabajadores, pero mientras calibra los indicadores que apuntan a una moderación de la expansión económica, la Fed ha anunciado que se tomará con paciencia la próxima subida de los tipos de interés.
Los mercados asimilaron también la cifra del déficit comercial de 2018, publicada por el Departamento de Comercio, que ascendió a 621.000 millones y está en su nivel más alto en diez años pese a las políticas proteccionistas del presidente Donald Trump.
El saldo negativo de la balanza comercial, por su parte, creció en diciembre hasta 59.800 millones, impulsado por el auge de las importaciones y la caída de las exportaciones.