La aerolínea irlandesa Ryanair aseguró este jueves que su calendario veraniego de vuelos no se verá afectado por la suspensión temporal de las operaciones con aviones de la serie Boeing 737 MAX.
Su director de Asuntos Legales y Reguladores, Juliusz Komorek, recordó este jueves que la flota de Ryanair está compuesta por 450 aparatos de la serie 737-800 e incluye "muchos aviones de emergencia distribuidos estratégicamente".
La compañía irlandesa, líder el Europa del sector de bajo coste, ha encargado al fabricante aeronáutico estadounidense Boeing un pedido de 135 aparatos 737 MAX 200 "Gamechanger", con una opción de compra sobre otras 75 unidades de este modelo, una variante del 737 MAX 8 de Ethiopian Airlines siniestrado el pasado domingo.
Ryanair espera la entrega del primer 737 MAX 200 el próximo abril, al que seguirán dos más en mayo y junio, respectivamente, y otros 50 antes del verano de 2020.
"No existe riesgo alguno para el calendario de este verano", declaró Komorek en una comparecencia ante los medios en Varsovia (Polonia), donde precisó que aún es pronto para analizar la posibilidad de cancelar ese pedido.
Boeing anunció este miércoles que continúa teniendo "total confianza en la seguridad de los 737 MAX" pero que, tras consultar con las autoridades de EEUU, les "recomendaron" la suspensión temporal de toda la flota de aviones de ese modelo.
El consejero delegado de Ryanair, Michael O'Leary, ya indicó el lunes que la aerolínea continuará operando "con normalidad" su flota de aviones Boeing 737 MAX hasta que se aclaren las circunstancias del accidente del Ethiopian Airlines, en el que murieron 157 personas.