Madrid, 20 mar (EFECOM).- El crecimiento de la capacidad aérea para este verano desde y hacia España, además de los vuelos domésticos, se ha moderado hasta un 2,5 %, al igual que en Europa, donde habrá un 3,2 % más de oferta que hace un año, según la Asociación de Líneas Aéreas (ALA).
Su presidente, Javier Gándara, ha matizado este miércoles, en una rueda de prensa, que este dato "hay que ponerlo en valor, teniendo en cuenta que llevamos varios años de crecimiento" y que, en el entorno actual, que la capacidad crezca del orden 2,5 % es "una buena noticia", mientras que la evolución del tráfico dependerá del factor de ocupación.
Se trata de un crecimiento que viene tras un invierno de aumentos ya también moderados, con un repunte del tráfico del 7,1 % frente a uno del 9,1 % de hace un año o del 9,5 % en la temporada 2016/17 y del 11,6 % en la de 2015/16.
De cara al verano, Gándara ha alertado de nuevos retrasos y cancelaciones que pueden producirse debido a la gestión del tráfico aéreo, así como a la meteorología, aunque espera que las medidas previstas por Eurocontrol mitiguen los problemas.
La asociación ha reclamado que las compensaciones y derechos de los consumidores en el caso de situaciones de retrasos y cancelaciones, que generan millones en costes, "no sean asumidos íntegramente por ellas", sino que también se repercutan en las diferentes organizaciones causantes de los mismos. "Al final somos las aerolíneas las que siempre estamos en el candelero", ha lamentado.
Para Gándara, los costes derivados del reglamento CE 261/2004 en comparación con lo que actualmente vale la mayoría de los billetes aéreos, son "desproporcionados", por lo que, desde las compañías aéreas, "consideramos que esto debería revisarse cuanto antes".
El número de retrasos debido a la gestión del tráfico aéreo en 2018 se ha incrementado en un 61,2 % frente al año anterior, mientras que una media de 1.250 vuelos al día han tenido una demora por el mismo motivo en ruta de más de 15 minutos, un 115 % más.
Cada minuto de retraso en un vuelo supone entre 70 y 80 euros para las compañías.
La previsión inicial de Eurocontrol es que los retrasos por gestión de tráfico aéreo en ruta se podrían duplicar este año, pasando de 2 minutos en 2018 a los 4 en 2019.
El objetivo es que, con las medidas que se prevén aplicar, la demora por vuelo se sitúe entre 1,9 y 2,8 minutos.
Según Gándara, la situación en España es "más complicada" porque su situación geográfica la hace más vulnerable a la congestión europea.
En España, sólo el 30 % de los retrasos por gestión del tráfico aéreo son atribuibles al proveedor de navegación aérea Enaire, que además ha tomado una serie de iniciativas para reducir el problema de la congestión aérea.
El presidente de ALA ha explicado que las aerolíneas están empleando muchos recursos para evitar estas situaciones como la mayor disponibilidad de aviones y tripulaciones de reserva, alquiler de aviones adicionales, refuerzo de recursos en los aeropuertos y la automatización de procesos.
La asociación pide un mayor diálogo entre empresas, reguladores y gobiernos para reformar el contexto operativo y normativo de la aviación y destaca la necesidad de avanzar más rápido en la creación del cielo único europeo, evitando la actual fragmentación del espacio aéreo.