Madrid, 25 mar (EFECOM).- Sacyr ha depositado ante notario los 7 millones de euros con los que considera que debe indemnizar a Globalvía por la venta de su participación en la concesionaria Itínere a Corsair, una compensación que la firma presida por Juan Béjar ha rechazado cobrar.
Sacyr vendió en febrero a Itínere Investco, gestionado por Corsair y APG, su 15,5 % en la concesionaria por 202 millones de euros, una operación con la que la gestora estadounidense pasó a controlar el 60,19 % de Itínere, por cuyo control también puja Globalvía, que ha reclamado judicialmente una compensación de 100 millones de euros.
La operación se produjo después de que un juez levantara la prohibición que había impuesto a Sacyr de vender su parte a cualquier tercero que no fuera Globalvía por entender que el acuerdo de venta conjunta contemplaba como condición suspensiva que Corsair pudiera ejercer su derecho de adquisición preferente.
Además, según el juez, las partes firmaron una carta de compensaciones en la que se establecían varios supuestos en los que los vendedores tendrían que indemnizarla si la operación no salía adelante, como, por ejemplo, que Corsair, en calidad de accionista de Itínere, ejerciera su derecho de compra preferente sobre la participación de Sacyr.
Tras la venta, Sacyr notificó que depositaba ante notario los 7 millones, "siempre que Globalvía suscribiese un acuerdo por el que diese por válido el derecho de primera oferta por el que vendieron, y se comprometiese a no reclamar nada en el futuro a la constructora", han señalado e Efe fuentes cercanas al proceso.
Según las mismas fuentes, Globalvía ha respondido a Sacyr que la interpretación que hacen del contrato de compraventa es "incorrecta" y que, por tanto, rechaza el referido depósito y le recuerda que sigue obligada a cumplir el contrato de compraventa según determine el juez.
La venta de la concesionaria, creada en 1996 por Sacyr, comenzó entre 2008 y 2009 con una operación que llevó a Citi a controlarla, para, en 2015, quedar en manos de Corsair a través de Gateway (37,9 %), Liberbank (5,67 %), Sacyr (15,5 %), Abanca (23,8 %) y Kutxabank (16,3 %).
Después de que en 2015 Citi traspasara sus participación a Corsair, el resto de accionistas acordó darle el poder de decisión dentro de la compañía a pesar de que su participación no superaba el 50 % y a cambio de que se comprometiera a darles salida.
Viendo que Corsair no cumplía con su parte, los socios minoritarios llevaron el caso a la Corte de Arbitraje de la Cámara de Comercio de Madrid para que anulara dicho pacto.
Iniciado el arbitraje, se sumó a la causa Globalvía, que en julio de 2018 anunció que había acordado la compra conjunta del 55,6 % de la concesionaria con Sacyr, Abanca y Kutxabank.
Tras dicho anuncio, Corsair movió ficha y el 10 de septiembre expresó a Sacyr su intención de ejercer su derecho de primera oferta sobre su participación en Itínere, valorada en unos 1.300 millones y que actualmente gestiona 600 kilómetros de autopistas en el norte de España.