Ibercaja descarta salir a bolsa en primavera y ve más probable hacerlo después del verano tras el reciente anuncio del retraso en la subida de los tipos de interés por parte del BCE y a la espera de cerrar la venta de una cartera de préstamos dudosos.
Según ha explicado este miércoles a Efe-Dow Jones una fuente cercana a la operación, antes su salida a bolsa, la entidad bancaria prefiere limpiar aún más su balance y deshacerse de créditos morosos por "un importe relevante".
Por otra parte, como adelanta el diario Cinco Días, el aplazamiento en la normalización de la política monetaria del BCE anunciada este mes "no ha ayudado" a la ejecución de la operación y "refuerza la impresión de que es prematuro".
Ibercaja prefiere además esperar a publicar sus resultados del primer trimestre a primeros de mayo para tener "información real del año en curso".
Pese a ello, el proceso de salida a bolsa sigue en marcha, aunque todavía no ha comenzado el "roadshow", una gira por distintas ciudades internacionales que durará dos meses y en la que se verificará el interés de los inversores institucionales.
Ibercaja, con sede en Zaragoza, pretende vender el 40 % del capital en su salida a bolsa, en la que no habrá tramo minorista, y no descarta una ampliación de capital simultánea si las condiciones del mercado son favorables, si bien "esto no está sobre la mesa" por el momento.
JP Morgan y Morgan Stanley son coordinadores de la transacción, UBS y Bank of America son colocadores y Rothschild es asesor financiero.
Por su parte, los despachos de abogados Uría Menéndez y Linklaters asesoran legalmente la operación.