Nueva York, 4 abr (EFECOM).- Una jueza de Nueva York dio este jueves dos semanas al fundador de Tesla, Elon Musk, y a la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) para que alcancen un nuevo acuerdo después de que el organismo acusara al empresario de haber violado un convenio anterior por realizar declaraciones "imprecisas".
La jueza federal Alison J. Nathan tomó esta decisión después de escuchar los testimonios de ambas partes en una sesión celebrada en el Tribunal del Sur de Manhattan, a la que Musk acudió ataviado con un traje negro y acompañado por su equipo de defensa.
Nathan les exigió que se reunieran lo antes posible y que le enviaran las conclusiones en una carta conjunta antes del próximo 18 de abril, en la que deben "resolver de manera clara" los asuntos que hoy les llevaron a testificar.
La sesión, que se prolongó dos horas, trató en su mayor parte de los intentos de la magistrada por aclarar varios términos contractuales que las distintas partes interpretaron de manera diferente.
La SEC denunció el 25 de febrero que Musk había violado un acuerdo que se había alcanzado el 29 de septiembre del pasado año por el cual Musk se comprometía a ser supervisado por Tesla en sus declaraciones "materiales" sobre la compañía automovilística y que pudieran afectar a la cotización de las acciones en Bolsa.
Los hechos se remontan al 19 de febrero, cuando Musk colgó un mensaje en el que afirmaba que Tesla produciría alrededor de 500.000 vehículos este año.
Posteriormente, el empresario rectificó y explicó que en realidad Tesla alcanzaría un ritmo de producción anual de 500.000 vehículos a finales de 2019.
Sin embargo, la SEC consideró que sus declaraciones habían sido "imprecisas" y que podrían haber alterado el valor de las acciones de la firma.
Según el organismo, las declaraciones de Musk "razonablemente podrían contener" información material sustancial de Tesla publicada sin la aprobación específica de la dirección de la compañía, un término que la jueza consideró impreciso y sujeto a interpretación.
Además, la SEC considera que el controvertido empresario había incurrido en repetidas violaciones del acuerdo entre ambas partes, algo negado por su defensa que alegó que Musk había mostrado en todo momento un compromiso de contención.
La SEC amenazó en agosto de 2018 a Tesla y Musk con una demanda por fraude después de que este declarase también en Twitter que había asegurado la financiación necesaria para sacar a Tesla de la bolsa y sugerir que para llevar a cabo la operación pagaría 420 dólares por acción.
Sin embargo, el 29 de septiembre, la Comisión del Mercado de Valores de Estados Unidos anunció que no seguiría adelante con su demanda tras haber alcanzado un acuerdo con Musk por el que el empresario dejaría la presidencia de Tesla durante tres años.
El acuerdo establecía, además del pago de 40 millones de dólares, el reemplazo de Musk por una persona "independiente", el nombramiento de dos consejeros independientes para su consejo de administración y el establecimiento de un "nuevo comité de consejeros independientes y pondrá más controles y procesos para supervisar las comunicaciones de Musk".
Precisamente este jueves, las acciones de Tesla caían un 8 % en Wall Street después de conocerse las cifras trimestrales de la compañía, por debajo de lo esperado, lo que hacía a los analistas cuestionarse si podrá cumplir sus compromisos de entrega de vehículos de este año.