Nueva York, 9 abr (EFECOM).- Wall Street se tiñó este martes de rojo afectado por el nerviosismo que causa la próxima temporada de resultados empresariales, por lo que los tres principales indicadores del parqué neoyorquino terminaron la sesión en terreno negativo.
El Dow Jones de Industriales, el principal indicador de Wall Street, fue el mayor afectado por la mala jornada, en la que perdió más de 190 puntos, que se tradujo en un descenso del 0,72 por ciento para este grupo, en el que se concentran 30 de las empresas más destacadas de la plaza estadounidense.
El S&P 500 también sufrió un descenso, en su caso del 0,61 por ciento, que para el Nasdaq fue un poco menor, del 0,56 por ciento, arrastrado por la caída de importantes compañías tecnológicas como Apple, Amazon, Microsoft y Alphabet (la matriz de Google).
Tanto el Dow como el S&P se marcaron así su peor jornada desde el pasado 22 de marzo, algo que para el Nasdaq se remonta al 27 de marzo.
El parqué neoyorquino se centró hoy en la próxima temporada de resultados empresariales, en la que las compañías empezarán a presentar sus cuentas del primer trimestre del año a finales de esta semana.
Los bancos JP Morgan Chase y Wells Fargo lo harán el viernes, mientras que Citigroup y BlackRock tiene previsto publicarlas la semana que viene.
Bank of America, que también presentará sus números la semana que viene, informó hoy que ascenderá el salario mínimo de sus empleados a 20 dólares la hora, empezando con un incremento a 17 dólares la hora a partir del 1 de mayo.
Los inversores no parecían tener hoy su confianza depositada en las financieras, con Bank of America, Goldman Sachs, JP Morgan y Morgan Stanley cayendo más de un 0,5 por ciento.
Y es que Wall Street espera que los beneficios de las compañías caigan en esta temporada de resultados en comparación con trimestres recientes.
"Nos adentramos en la temporada de ganancias y se espera que el crecimiento sea negativo por primera vez desde 2016. Creo que los inversores están preocupados por eso", dijo el jefe de inversiones de Cresset Wealth Advisors, Jack Ablin, que apuntó que de momento parece que "sólo se están ajustando los cinturones".