Madrid, 10 abr (EFECOM).- La ministra de Economía, Nadia Calviño, ha asegurado este miércoles que pensar que una bajada masiva de impuestos va a elevar la recaudación, en referencia implícita a las promesas electorales del PP, no es más que una propuesta "milagrosa" que "está muy lejos de la ortodoxia y la responsabilidad".
Durante su intervención en el Foro Cinco Días, Calviño ha incidido en que hay aprovechar que la economía española todavía está en la parte expansiva del ciclo para abordar reformas estructurales que huyan de "recetas mágicas y soluciones milagrosas que no resisten el más mínimo examen de contraste con la realidad".
A su juicio, cualquier bajada de impuestos tiene que llevar como contrapartida un ajuste en el gasto similar para poder cuadrar las cuentas y mantener una recaudación que permita financiar los servicios esenciales del Estado del bienestar, como la sanidad, la educación o las pensiones.
"En el terreno de la cuentas públicas es preciso actuar con prudencia", ha añadido la ministra, que ha recordado también que hay que mantener el compromiso de reducción del déficit, algo que resulta incompatible con una reducción de los ingresos que no vaya acompañada de un ajuste de gastos.
En este sentido, ha recordado que la previsión del Gobierno es que el déficit baje al 2 % del PIB al cierre de 2019 y ha negado con rotundidad que el próximo Ejecutivo vaya a tener que hacer un ajuste nada más llegar para cuadrar las cuentas públicas.
Ha explicado que la evolución económica y las medidas ya adoptadas por el Gobierno de Pedro Sánchez van a permitir bajar el déficit del 2,6 al 2 % del PIB sin necesidad de ajustes adicionales.
Calviño ha recordado que las medidas incluidas en el decreto ley del pasado 28 de diciembre -entre ellas el incremento de las bases de cotización- van a incrementar la recaudación en 3.300 millones de euros en 2019, mientras que las decisiones adoptadas por decreto en las últimas semanas cuestan 1.100 millones.