Economía

Santander pensaba que fichar a Orcel sería más barato por su relación con UBS

12 abril, 2019 11:53

Santander, 12 abr (EFECOM).- El Banco Santander ha admitido ante los accionistas que pensaba que el fichaje del italiano Andrea Orcel como consejero delegado del grupo le saldría más barato, especialmente porque la entidad ha sido durante muchos años un cliente importante de UBS, el banco helvético en el que trabajaba.

Según ha explicado el consejero coordinador y presidente de la comisión de nombramientos y de la comisión de retribuciones, Bruce Carnegie-Brown, cuando el banco anunció a finales de septiembre el nombramiento de Orcel como consejero delegado lo hizo sin poder determinar con seguridad lo que le costaría.

El Banco Santander había acordado la retribución anual que cobraría el hasta entonces banquero de inversión cuando se incorporara al grupo presidido por Ana Botín, sin embargo, en ese momento era imposible determinar el coste que tendría para la entidad pagar el bonus acumulado por sus responsabilidades en UBS.

Por eso, ha justificado este viernes Carnegie-Brown, se procedió al nombramiento de Orcel en base a una estimación razonada del coste, de acuerdo con el asesoramiento que recibió, los precedentes y las expectativas de que podría revisarse a la baja esas retribuciones diferidas, que rondaban los 55 millones de euros.

Además, ha admitido, Santander esperaba que esa cantidad se redujera teniendo en cuenta muy especialmente que durante muchos años había sido un cliente importante para UBS.

Anteriormente, durante su discurso la presidenta del Banco Santander, Ana Botín, ya había explicado que en enero el consejo de Banco Santander decidió no fichar a Orcel como consejero delegado del grupo al considerar "inaceptable" el coste que habría supuesto contratarle.

Y se felicitó de poder seguir contando con José Antonio Álvarez como su "número dos", además de vicepresidente del consejo de administración.

"Seguiremos trabajando juntos y con resultados tan positivos como los que hemos obtenido durante los últimos años", un comentario de Botín elogiado posteriormente por uno de los primeros accionistas en tomar la palabra.