Madrid, 21 abr (EFECOM).- La huelga de vigilantes en el aeropuerto madrileño de Barajas ocasiona esta mañana "aglomeraciones intermitentes" en la terminal, ha informado el sindicato convocante, mientras que AENA informa de "normalidad" e Iberia pide a los viajeros que acudan con tiempo a gestionar sus vuelos.
Por su parte el ente público gestor Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) ha informado de que "no hay incidencias destacables" y que el tráfico es el "normal" en la operación retorno de Semana Santa.
Según AENA, para la jornada dominical hay programados 1.163 vuelos con un total de 214.540 pasajeros previstos.
En su teléfono de información a los viajeros, AENA advierte de que "debido a la huelga convocada por trabajadores de la empresa Ilunion los tiempos de paso en los controles de seguridad podrían verse afectados".
El portavoz del sindicato Autónomo de Trabajadores de Empresas de Seguridad de Madrid (ATES) Jordi Montejo ha dicho a Efe que entre las 5:00 y las 8:30 horas hubo "bastante movimiento", con colas de viajeros de entre 40 y 45 minutos.
Según este portavoz, después ha habido un periodo de más tranquilidad pero que a partir de las 09:30 se han empezado a llenar las terminales, y prevé que a lo largo de la jornada habrá "picos" de saturación en las salidas con una previsión que ha estimado en 5.000 pasajeros seguidos cada hora.
El "colapso" previsto, según Montejo, obedece a que los vigilantes que no tienen servicios mínimos han hecho huelga al 100 por cien.
El portavoz de los trabajadores ha dicho que Iberia ha estado enviando entre el sábado y hoy, domingo, mensajes a los viajeros para recomendarles que anticipen su presencia en Barajas para evitar colas y pérdida de vuelos.
La previsión de los vigilantes, según Montejo, es "continuar la huelga indefinida que comenzaron el día 12 hasta conseguir una solución de Ilunión y de AENA y aprovechando que la gente está muy concienciada".
El portavoz sindical ha dicho también que no ha habido "ninguna comunicación oficial" por parte de la empresa.
Según el sindicato, los 700 trabajadores convocados a la huelga pertenecen a la empresa Ilunion y a los puestos de revisión anti-explosivos, aunque muchos han sido derivados durante los días de huelga a los arcos de seguridad y a los escáneres, lo que supone que muchas de esas pruebas se queden sin hacer.
El sindicato ATES reivindica el pago de los pluses de aeropuertos, radioscopia y variables a toda la plantilla, así como la modificación de todos los contratos de obra y servicio a indefinidos, y que se ponga fin a las condiciones "lamentables" en que desarrollan su trabajo.