El siniestro de un Boeing 737 Max 8 el pasado marzo en Etopía fue el segundo accidente en cinco meses protagonizado por este aparato tras el de octubre de 2018 en Indonesia y, debido a las similitudes, agravó una crisis que la empresa aeronáutica más grande de Estados Unidos todavía se esfuerza en resolver.

¿QUÉ SE SABE DE LA INVESTIGACIÓN DEL ACCIDENTE?

A falta de conocer el informe final de las autoridades etíopes, en el que colabora también EEUU, la versión preliminar apunta a un fallo técnico en el sistema de control de vuelo (MCAS): la tripulación siguió los procedimientos de seguridad pero no pudo desactivar el software automatizado, que hizo caer en picado la aeronave.

Boeing ha reconocido que en los dos aviones 737 MAX accidentados en Etiopía e Indonesia, que dejaron 346 fallecidos, el sistema MCAS se activó en respuesta a una información "errónea" del sensor del "ángulo de ataque", y se ha comprometido a hacer mejoras de seguridad, además de dar formación adicional a los pilotos.

¿EN QUÉ CONSISTEN LAS MEJORAS DE SEGURIDAD?

Según explica Boeing en su página web, el sistema de control de vuelo MCAS recibirá datos de dos sensores del "ángulo de ataque", en lugar de uno, y si al compararlos hay un desacuerdo de más de 5,5 grados, no se activará y alertará a los pilotos a través de un indicador en el panel.

Los pilotos seguirán teniendo siempre la habilidad de anular el MCAS y controlar manualmente la aeronave, de acuerdo al consejero delegado Dennis Muilenburg, y además recibirán un plan de entrenamiento para entender cómo funciona el sistema y cómo desactivarlo si hay un problema.

¿EN QUÉ PUNTO DEL PROCESO ESTÁN LAS MEJORAS?

Boeing aún no ha entregado el paquete final de mejoras a la Administración Federal de Aviación (FAA), aunque a principios de abril estimó que sería "en las próximas semanas" e, indicó el miércoles pasado Muilenburg a medios estadounidenses, ya se ha realizado el vuelo de prueba previo al de certificación.

Entretanto, la FAA ha considerado en una revisión inicial que el sistema antibloqueo de los 737 MAX es "operativamente adecuado", y su Junta de Estandarización ha recomendado en un borrador abierto a enmiendas que los pilotos reciban una formación informática adicional para utilizar el MCAS.

Además, el regulador estadounidense ha establecido un equipo técnico que cuenta con la colaboración de la NASA y expertos de ocho países, más la Unión Europea, para revisar a fondo la seguridad de la aeronave, y se espera que se reúnan el 29 de abril y que su trabajo dure 90 días.

Este grupo de trabajo, dirigido por el presidente de la Junta Nacional de Seguridad en los Transportes estadounidense, Chris Hart, comprobará la certificación del sistema de control MCAS, evaluará su diseño y cómo interactúan con él los pilotos, entre otras cosas.

¿EN QUÉ SITUACIÓN ESTÁ LA FLOTA DE LOS 737 MAX?

Hasta marzo, Boeing tenía entregados 387 aviones de la gama 737 MAX en todo el mundo, pero están paralizados por orden de las autoridades que regulan el espacio aéreo en medio centenar de países, entre ellos los de la Unión Europea, Estados Unidos, China y Canadá.

Se han visto afectadas, sobre todo, aerolíneas estadounidenses como American Airlines, la más grande de EEUU, que opera 24 de estos aparatos y mantendrá cancelados los vuelos operados por ellos hasta el 19 de agosto, lo que afecta a 115 vuelos diarios.

Otras aerolíneas han visto interrumpidas sus operaciones al mantener en tierra estos aviones, como Southwest, que tiene 31 aparatos de este modelo, Air Canada (24), Air China (16), FlyDubai (14), LionAir (14) o Norwegian (18), señala Boeing en un documento de pedidos y entregas.

Mientras tanto, Boeing ha paralizado las entregas de sus modelos 737 MAX, tras entregar 89 en el primer trimestre, y ha reducido la producción mensual de 52 unidades a 42 mientras avanza en el proceso de certificación de sus aviones con el software mejorado.