Red Eléctrica obtuvo un beneficio neto de 191 millones de euros en el primer trimestre del año, un 1 % más que los 189 millones contabilizados en el mismo periodo de 2018.
Por su parte, el resultado bruto de explotación (ebitda) ascendió a 405,9 millones, lo que supone un 0,9 % más que el obtenido en los tres primeros meses del pasado año, gracias a las medidas de eficiencia puestas en marcha por la compañía, según las cuentas remitidas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La cifra de negocio fue de 499,7 millones, el 0,6 % más, gracias a la retribución de la actividad de transporte de electricidad en España, los ingresos regulados por la operación del sistema (16,5 millones), la actividad de telecomunicaciones en España (24,6 millones) y los ingresos derivados de la actividad internacional (8,6 millones).
Además, a ello hay que añadir también los resultados de la empresa chilena TEN, que ascendieron a 1,9 millones de euros.
Las inversiones del grupo alcanzaron los 71,8 millones de euros, un 0,7 % superior a las del primer trimestre de 2018, y de estas, 56,3 millones de euros se destinaron al desarrollo de la red de transporte de España.
Por su parte, al desarrollo del negocio internacional se destinaron 9,1 millones de euros para la construcción de una línea de transporte en el sur de Perú y otra en el norte de Chile.
En cuanto a la operación del sistema eléctrico, la disponibilidad fue superior al 98 % en la península, del 98,7 % en Baleares y del 98,8 % en Canarias.
Los dividendos pagados ascendieron a 147,3 millones de euros, un 7,1 % mayor que los 137,5 millones de euros del ejercicio anterior, en línea con la política de remuneración al accionista contemplada en el Plan Estratégico 2014-2019. Además, está previsto el pago de un dividendo complementario para el 1 de julio.
La deuda financiera neta del grupo a 31 de marzo fue de 4.584,2 millones de euros frente a los 4.682,7 de finales de 2018.