Washington, 13 may (EFECOM).- El presidente de EEUU, Donald Trump, dijo este lunes que se reunirá con sus homólogos de Rusia, Vladímir Putin, y de China, Xi Jinping, durante la cumbre del G20 que se celebrará el 28 y 29 de junio en Osaka, en el oeste de Japón.
El anuncio de su reunión con Xi llega en un momento de fuerte tensión entre las dos mayores economías mundiales, después de que EEUU recrudeciera el pasado viernes sus aranceles a miles de productos chinos y China anunciara hoy nuevos gravámenes a bienes estadounidenses por valor de 60.000 millones de dólares.
"Vamos a reunirnos (Xi y yo) en el G20 en Japón y esa será probablemente una reunión muy fructífera", afirmó Trump durante un encuentro en la Casa Blanca con el primer ministro húngaro, Viktor Orbán.
"También me reuniré con el presidente Putin", añadió Trump poco después.
Ese último encuentro será el primero formal entre Trump y Putin en casi un año, desde la cumbre que mantuvieron el pasado julio en Helsinki, y también el primero desde que concluyó en Estados Unidos la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre la presunta injerencia rusa en las elecciones de 2016.
A finales del año pasado, Trump canceló una reunión con Putin debido al apresamiento en noviembre de 24 marinos ucranianos por parte de guardacostas rusos en el Mar Negro, aunque ambos líderes hablaron brevemente durante la foto de familia de la cumbre del G20 que se celebró en diciembre pasado en Buenos Aires.
A los temas habituales de la agenda entre Trump y Putin, como Siria, Irán o Ucrania, se ha sumado en los últimos meses la situación en Venezuela, que centró parte de una conversación telefónica que los dos líderes mantuvieron a comienzos de este mes.
Estados Unidos, como otros 50 países, reconoce como presidente legítimo de Venezuela al líder opositor Juan Guaidó, mientras que Rusia sigue respaldando al mandatario Nicolás Maduro, y en marzo envió a Caracas dos aviones con un centenar de militares.
En cuanto a Xi, Trump lleva meses hablando de una posible reunión con él para cerrar un acuerdo que permita detener la actual guerra comercial bilateral, pero las negociaciones para ello se complicaron a finales de abril, y Estados Unidos decidió aumentar al 25 % sus aranceles a productos chinos por valor de 200.000 dólares.
Además, Trump ordenó el viernes a su Gobierno iniciar el proceso para imponer aranceles a otros 300.000 millones de dólares en productos chinos, lo que cubriría la práctica totalidad de las exportaciones de ese país a EEUU, pero hoy dijo que aún no ha decidido si seguirá adelante con ese castigo.