Las acciones de Ryanair continúan descendiendo y cotizan en la Bolsa de Londres a un 3 % menos respecto al pasado viernes, después de que la aerolínea irlandesa informase este lunes de que sus beneficios cayeron el 38,9 % durante su último ejercicio fiscal.
Los títulos de la compañía líder en Europea del sector de bajo coste caían un 3,29 % en el parqué londinense hacia las 14.00 horas GMT hasta alcanzar un valor ligeramente superior a los 10 euros por cada acción.
Su consejero delegado, Michael O'Leary, atribuyó hoy el descenso de los beneficios, los más bajos en cuatro años, a la batalla por la tarifas baratas que libran las aerolíneas en Europa, así como por el encarecimiento del combustible, los costes de plantilla y el pago de compensaciones por cancelaciones y retrasos de vuelos.
En este contexto, Ryanair, como había previsto en dos análisis previos, señaló que obtuvo un beneficio neto de 885 millones de euros en su último ejercicio fiscal (hasta el 31 de marzo), el 38,9 % menos que en el año anterior.
No obstante, la aerolínea destacó que los ingresos auxiliares, que incluyen las ventas a bordo, recargos por equipaje o tarifas de embarque con prioridad, crecieron un 19 %, hasta 2.400 millones de euros.
Esa subida contribuyó al aumento del 6 % en la facturación total, hasta 7.560 millones de euros, mientras que la tarifa aérea media se situó en 37 euros, el 6 % menos que en el ejercicio precedente.