Madrid, 23 may (EFECOM).- El presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha dicho este jueves que espera que en los conflictos de Venezuela y Libia haya una salida dialogada que evite el derramamiento de sangre y conduzca a la estabilidad en esos países.
Brufau, que ha inaugurado la jornada Energía y Geoestrategia 2019, en que se ha presentado la publicación del mismo nombre de este año, ha indicado que Venezuela y Libia, países en los que Repsol está presente, afectan de manera importante al negocio de los hidrocarburos.
Ha añadido que espera que esos dos conflictos se resuelvan de manera positiva para la población de esos países, así como para las empresas que tienen que ser el pilar de su recuperación.
También ha repasado los desafíos a los que se enfrenta el mundo en la actualidad, como el 'brexit' o salida del Reino Unido de la UE, un problema al que los británicos todavía no han sabido dar salida y que considera seguirá marcando la agenda internacional durante un tiempo.
Además, se ha referido a la protesta de los denominados "chalecos amarillos" en Francia, en la que las clases menos privilegiadas se han revelado contra la subida de las tasas a los combustibles, y que está ganando en participación y virulencia.
También ha recordado que se han cumplido dos años del mandato del presidente estadounidense, Donald Trump, cuyas represalias económicas no tienen efecto sobre los países a los que van dirigidas, pero sí en las empresas internacionales que operan en esos países.
Asimismo, se ha referido al abandono por Estados Unidos de varios acuerdos internacionales, como el antinuclear con Irán, el de cooperación económica Transpacífico o el Acuerdo contra el Cambio Climático de París.
El presidente de Repsol ha señalado también que el cambio climático está empezando a afectar a la seguridad energética.
El teniente general director del Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional (Ceseden), Rafael Sánchez Ortega, ha indicado, durante la presentación del ya sexto volumen de Cuadernos de Energía y Geoestrategia, que en su introducción se apunta que el panorama político general es "profundamente incierto".
Ha indicado que desde el anterior número de Energía y Geoestrategia las tensiones en el mundo no han hecho sino aumentar y ha añadido que la retirada de Estados Unidos del acuerdo antinuclear con Irán ha introducido en un periodo de mayor riesgo al mundo del petróleo.
Asimismo, ha señalado que el cambio climático va a afectar al poder geopolítico de los Estados y ha agregado que los intereses estratégicos de España tienen una relación directa con la energía.
El presidente del Club de la Energía y de Viesgo, Miguel Antoñanzas, ha indicado que los factores de incertidumbre que había en el mundo un año antes no sólo no han desaparecido, sino que se han intensificado.