Grifols invertirá 1.400 millones hasta 2022 y se propone producir en China
La multinacional española Grifols destinará 1.400 millones de euros a inversiones hasta 2022, unos 300 de ellos en España, y ha dejado claro que apuesta fuerte por China, donde se propone producir hemoderivados en un futuro próximo para dar un nuevo salto en su negocio.
Los dos consejeros delegados de Grifols, Víctor Grífols Déu y Ramon Grífols Roura, han anunciado este volumen de inversión durante la Junta General de Accionistas que se ha celebrado en Sant Cugat, Barcelona, una cifra que supone una actualización de su plan de inversiones en activos.
El plan abarca el período 2018-2022, por lo que algunas inversiones en nuevas plantas o en actualizaciones de fábricas ya se han materializado, unos 317,1 millones, según cálculos de Efe, ya que la multinacional destinó 252,2 millones en 2018 a inversiones y otros 64,9 millones en el primer trimestre de 2019, según consta en sus cuentas.
El 66 % de las inversiones serán absorbidas por la división Bioscience, la principal del grupo, dedicada a la producción de medicamentos derivados del plasma; el 10 % por la de Diagnóstico, la segunda en importancia para el grupo, y el 3 % por la hospitalaria, entre otros destinos.
Durante la Junta, el director industrial de Grifols, Daniel Fleta, ha explicado que la compañía invertirá 10 millones en ampliar la planta de inyección que tiene en Murcia y que destinará otros 18 millones a ampliar el complejo corporativo que tiene en Sant Cugat con un quinto edificio, y ambos proyectos arrancarán este año y deberían estar listos en 2021.
La responsable de relaciones con los inversores, Nuria Pascual, ha explicado en la rueda de prensa posterior a la Junta que Grifols ha destinado unos 13 millones a comprar un terreno en Lliçà de Vall (Barcelona) para trasladar allí la planta de instrumentación de diagnóstico que había en Parets del Vallès (Barcelona) y al mismo tiempo ampliarla, para lo que se invertirán otros 10 millones de euros.
Por otra parte, la Junta ha servido para confirmar la apuesta de Grifols por China. "No hay más solución que obtener el plasma y fabricar las cosas desde China", ha dicho el presidente de la multinacional, Víctor Grífols Roura, que ha añadido que espera obtener "a finales de año" la autorización tanto de las autoridades de Estados Unidos como del gigante asiático para convertirse en el segundo accionista de Shanghai Raas.
En virtud de este acuerdo, Grifols tendrá el 26,2 % de esa compañía, mientras que Shanghai Raas ostentará el 45 % de los derechos económicos y el 40 % de los políticos de Grifols Diagnostic Solutions, filial al 100 % de Grifols.
Los consejeros delegados de Grifols han precisado a los periodistas que Shanghai Raas tenía previsto ya, antes de ese acuerdo, construir una nueva fábrica en China, y que ahora la compañía farmacéutica ayudará a su socio local a diseñarla.
Preguntados por las inversiones que podría hacer la multinacional española en esa instalación, han comentado que todavía no manejan datos de la inversión conjunta.
Grifols quiere estar a toda costa en el país asiático porque actualmente hay 1.400 millones de chinos y sólo se fracciona plasma por unos 8 millones de litros al año, frente a los 40 o 50 millones de litros de Estados Unidos (EEUU) para atender a un mercado de 400 millones de personas.
"China es una aventura, igual que cuando entramos en EEUU", ha confesado Víctor Grífols Déu, que ha evitado especular sobre qué porcentaje de negocio puede aportar el gigante asiático a Grifols en un futuro.
Por otra parte, los consejeros delegados de la multinacional no creen que las tensiones comerciales entre EEUU y China afecten a sus planes en este último, donde Grifols quiere ir introduciéndose "con cuidado", pero con mentalidad "de largo plazo", han dicho.
La Junta de hoy ha sido la última como consejera independiente de la bióloga Anna Veiga, que entró en el consejo de Grifols en diciembre de 2008, a quien ahora sustituye Enriqueta Felip, responsable de la unidad de tumores torácicos del hospital Vall d'Hebron.