Madrid, 27 may (EFECOM).- Las constructoras españolas priorizarán la inversión en soluciones tecnológicas e I+D por encima de la internacionalización, a diferencia de la mayoría de constructoras del resto del mundo, según las conclusiones del informe sobre perspectivas del sector de la consultora KPMG.
Así, el 60 % de las empresas españolas del sector consultadas tiene previsto invertir en tecnología en el próximo año, mientras que un 40 % lo focalizará a la I+D. A nivel global, estos porcentajes se sitúan en el 50 % y el 25 %, respectivamente.
Por el contrario, el 54 % de los constructores encuestados cree primordial invertir en internacionalización, mientras que en el caso de los españoles el porcentaje es del 33 %.
A nivel internacional, América Latina es el área prioritaria para los españoles en su expansión (19 %), seguida de Estados Unidos (15 %), México (8 %), el resto de la Unión Europea (8 %) y el Reino Unido (7 %).
En este sentido, el 42 % de las constructoras cree que su peso internacional aumentará (un 33 % de las españolas), frente al 25 % que considera que se mantendrá igual (el 42 % en el caso de las españolas).
No obstante, el número de compañías del sector en España que no tienen presencia internacional es menor que la media global: un 22 % frente al 29 % a nivel mundial.
Asimismo, los empresarios españoles se muestran 17 puntos más optimistas que la media mundial sobre el estado de la construcción, y solo el 25 % piensa que va a empeorar durante el 2019.
Asimismo, casi la mitad de los constructores nacionales esperan aumentar su inversión durante 2019, algo por encima de la media mundial, aunque, por el contrario, prevén menores aumentos de plantilla que la media del sector.
En el plano tecnológico, los empresarios esperan que la tecnología les ayude a reducir los costes y reconocen que el sector se encuentra por detrás de la media comparado con otros negocios (el 55 % del sector lo cree).
En su informe, KMPG describe un escenario en el que existen tres tipos de jugadores en el sector.
A nivel global, el informe determina que hay un 20 % de empresas líderes altamente tecnológicas, un 60 % de constructoras de tamaño medio y un 20 % que se sitúa a la cola y que responde a compañías no diversificadas y centradas en el bajo coste.
Entre las claves que la consultora señala se encuentran la implantación de procesos de buen gobierno y controles que aseguren que las obras se desarrollen en plazo y lleven un buen control del desarrollo, algo que solo ha implantado un 66 % de las empresas "lideres".