Cabify ha anunciado este jueves que sigue operando en Valencia y Alicante tras "adaptar su modelo de negocio a la nueva regulación" sobre VTC, después de que Uber comunicara que dejará de trabajar en Valencia el 1 de junio por la "obligatoriedad de esperar 15 minutos adicionales en cada servicio".
Un comunicado de Cabify explica que ha adaptado su modelo de negocio a "las restricciones impuestas por la normativa aprobada por la Generalitat" Valenciana sobre plataformas de contacto entre usuarios y vehículos con conductor (VTC) y que ofrecerá su servicio en Valencia y Alicante a través de la empresa Miurchi Car S.L., que forma parte de su grupo empresarial.
Para Cabify, "los usuarios tan solo tendrán que aceptar unos nuevos términos y condiciones por los que contratarán un nuevo servicio de transporte a través de la aplicación y, transcurridos los primeros 15 minutos desde esa aceptación, podrán solicitar su siguiente trayecto".
La empresa española asegura que con su decisión "reafirma su compromiso con la ciudadanía, el empleo y los 300.000 usuarios que tiene registrados en la Comunidad Valenciana, alumbrando una solución que implica, sin embargo, la asunción de un mayor riesgo empresarial y mayores costes operativos para la compañía".
Cabify considera que las condiciones impuestas por la Generalitat Valenciana, que entran en vigor el 1 de junio, "en nada benefician ni a la ciudadanía ni a los usuarios".