Ruth del Moral
Madrid, 31 may (EFECOM).- Expertos, economistas y analistas coinciden en que los aranceles que EEUU quiere imponer a los productos que entren de México dañarán no sólo al comercio hispano mexicano sino sobre todo a las empresas del sector bancario español implantadas allí.
México es desde hace años la principal fuente de ingresos de BBVA y uno de los diez mercados clave del Banco Santander, mientras que el Sabadell obtuvo en 2016 licencia para operar como entidad financiera en México, donde además está presente la aseguradora Mapfre.
De hecho el BBVA canaliza las remesas que envían los inmigrantes mexicanos que trabajan en EEUU y además la entidad fue pionera en conceder préstamos hipotecarios en México.
"Con los aranceles, México perderá exportaciones, bajará su PIB, el ahorro de los ciudadanos y por ende el negocio bancario", augura el catedrático de banca y bolsa de ESADE, Robert Tornabell, en declaraciones a
El Director de Coyuntura y Economía internacional de FUNCAS, Raymond Torres, afirma que esta nueva escalada en la guerra comercial que ha emprendido EEUU afectará negativamente a la economía mexicana, a sus importaciones y por lo tanto a la relación comercial con España, socio preferente de México.
Las ventas españolas a México, que en el primer trimestre han caído casi el 10 %, podrían verse aún más deterioradas a lo que se sumaría un peor clima en el conjunto de mercados internacionales, recuerda.
Torres avisa de que la amenaza "hay que tomarla en serio" y que además Trump podría acogerse a alguna cláusula vinculada a la seguridad nacional ante futuros recursos judiciales que pudiera interponer la OMC o México por considerar que va en contra del tratado de libre comercio entre EEUU, Canadá y México (T-MEC).
Los analistas consultados por EFE coinciden en que el objetivo de Trump es atraer a su país las inversiones americanas implantadas en México pero alertan de que la economía americana ya está suficientemente "recalentada" y que al final serán las propias empresas americanas las que se verán perjudicadas porque muchas de ellas fabrican en México.
"Trump puede hacer descarrilar la economía mexicana, frenar la economía mundial. Sería un desastre, paralizaría la inversión", añade Gonzalo García Analista de AFI y especialista en área de Mercados.
García cree que la repercusión en las empresas españolas presentes en México será indirecta ya que no son de naturaleza industrial y las menos están vinculadas a la automoción.
Alimentos, vino, hoteles, servicios financieros y empresas de infraestructuras son los negocios que podrían decaer en caso de que empeore también la confianza de los inversores internacionales en la economía mexicana, alude.
En este sentido, las principales empresas que están en México son Repsol que llegó en 1999 y está presente en toda la cadena de valor del petróleo y gas, Naturgy que presta servicio a 62 ciudades y participa en el sector de generación eléctrica, Iberdrola, con más de 20 años de presencia en México y que tiene previsto invertir 5.000 millones de dólares.
Siemens Gamesa, OHL, ACS, Acciona, FCC, Sacyr o Técnicas Reunidas son otras de las compañías españolas en México mientras que en el terreno hotelero destacan RIU, Barceló, Meliá, Iberostar o el Grupo Piñero e Inditex tiene 414 tiendas.
El premio Nacional de Economía y Medio Ambiente y político español Ramón Tamames argumenta a EFE que la amenaza de estos aranceles es la "reiteración de lo que dijo Trump antes de revisar el acuerdo de libre comercio, por lo que es todavía más impugnable".