El consejo de administración de Fiat Chrysler (FCA) anunció este jueves en un comunicado que ha retirado su propuesta de fusión realizada al grupo Renault debido a que no se dan las condiciones políticas en Francia para que sea un éxito. Un anuncio que se ha traducido en caídas del 7% para el grupo galo en la Bolsa de París y un comportamiento plano para el grupo ítalo-americano en el parqué milanés.
El grupo automovilístico FCA añade que sigue "firmemente convencida" de la razón convincente y transformadora" de su propuesta, una operación que estaba valorada en unos 40.000 millones de dólares.
Con anterioridad, el consejo de administración de Renault había notificado en París que -a petición del Estado francés, principal accionista- no se había podido pronunciar finalmente este miércoles sobre la propuesta de fusión "debido al deseo expresado por los representantes del Estado francés de aplazar el voto a un consejo posterior".
El comunicado de FCA informa de que "ha resuelto retirar su propuesta de fusión realizada a Grupo Renault", y que "sigue firmemente convencida de la razón convincente y transformadora" de su propuesta". Subraya que su iniciativa "ha sido ampliamente apreciada desde su presentación, cuya estructura y términos fueron cuidadosamente equilibrados para ofrecer beneficios sustanciales a todas las partes".
La nota del grupo FCA afirma que "ha quedado claro que las condiciones políticas en Francia no existen actualmente para que tal combinación proceda exitosamente".
El consejo de Fiat Chrysler agradece el "compromiso constructivo" al Grupo Renault, en particular a su presidente y su director ejecutivo, y también a los socios de la alianza con Nissan Motor y Mitsubishi". El grupo agrega que "continuará cumpliendo con sus compromisos a través de la implementación de su estrategia".
La decisión sobre una fusión a partes iguales con FCA se esperaba este martes, cuando el consejo de administración informó ya de un primer aplazamiento.
El pasado 30 de mayo, el consejo de Renault avanzó su decisión de estudiar "con interés" la posibilidad de esa fusión, que según sus primeras impresiones lo reforzaría industrialmente y sería "generador de valor adicional para la alianza" con Nissan y Mitsubishi.
Sin embargo, la posición de las japonesas Nissan y Mitsubishi ha sido uno de los elementos de conflicto en las negociaciones. El CEO de Nissan Motor, Hiroto Saikawa, consideró este lunes que pese a las nuevas oportunidades de negocio la fusión "alteraría significativamente la estructura" de la compañía francesa.
Por su parte, el ministro francés de Finanzas, Bruno Le Maire, justificó este miércoles el aplazamiento de la decisión de Renault sobre su fusión para poder establecer las condiciones fijadas por ambas partes.
En una entrevista en la emisora "RMC", Le Maire insistió en que el Estado, primer accionista de Renault donde posee el 15 % de su capital, "vela con firmeza por los intereses industriales de Renault y Francia". "Queremos hacer esta fusión pero no con cualquier condición (...) sino con la condiciones que hemos fijado. Tomaremos el tiempo que haga falta", dijo.
Entre las condiciones, el Gobierno francés exigía que se conservaran los centros industriales y los empleos en Francia (donde Renault tiene 48.600 trabajadores) y que el Estado francés tenga representación en el consejo que resultaría de la fusión.
El grupo ítalo-estadounidense esperaba lograr con la fusión sinergias anuales superiores a los 5.000 millones de euros de un conjunto cuya capitalización bursátil debería superar los 30.000 millones y vender 8,7 millones de vehículos.