El grupo Osborne ha informado hoy de que su beneficio operativo se situó en 36,5 millones de euros al cierre de 2018, lo que supone una caída del 12% en comparación con el año anterior.
Así se desprende de los datos del último ejercicio y las cifras del año 2017 facilitadas por la propia firma, que reflejan también una bajada de su facturación del 6,4%, hasta los 218 millones de euros.
La compañía, propietaria de marcas como Montecillo (vino), Magno (brandy), Nordés (ginebra), Anís del Mono y Cinco Jotas (jamón ibérico), ha celebrado hoy su Junta General de Accionistas, órgano que según estas mismas fuentes ha aprobado las cuentas del último ejercicio.
"El ejercicio 2018 ha sido un año clave en el que hemos renovado y reforzado nuestra organización y en el que hemos aprobado un plan estratégico sustentado en el crecimiento de nuestras marcas 'premium' y en la innovación y el desarrollo del portafolio", ha señalado en un comunicado el presidente de la firma, Ignacio Osborne.
Ha destacado que la comercialización de marcas propias -el grupo también tiene acuerdos para distribuir otras enseñas- creció un 3% durante el último año, con la ginebra Nordés como protagonista.
Desde la empresa, con sede en El Puerto de Santa María, en Cádiz, han resaltado que su enseña de jamón Cinco Jotas está cada vez mejor posicionada "en el mundo del lujo", con una vocación claramente internacional.
Y han subrayado que la firma de un nuevo protocolo del porcino en 2018 entre los gobiernos de España y China supone una extraordinaria oportunidad para la enseña.