Marta Garde
París, 16 jun (EFECOM).- Cuando el francés André Citroën lanzó en 1919 el primer modelo de su emporio automovilístico, su motor no sobrepasaba los 65 kilómetros por hora. Ahora, en su centenario, la marca trata de mostrar que el futuro ha llegado a nuestros días, con la apuesta por la electrificación como nueva hoja de ruta.
Desde aquel Tipo A 10 HP hasta el último 19-19 Concept, 100 % eléctrico, ha pasado un siglo que la firma homenajea en París con una muestra de vehículos icónicos que permite comprobar en plena calle, en el distrito XV, el mismo donde comenzó su historia, la evolución de la empresa liderada ahora por la británica Linda Jackson.
La compañía tuvo como base la antigua fábrica de obuses de Citroën, que, finalizada la Primera Guerra Mundial, él reconvirtió para hacer coches en serie.
"Nuestro legado es nuestra aportación a la industria. Desafiamos algunas reglas y conseguimos modelos diferentes bastante asombrosos. Ahora estamos centrados en el futuro y en soluciones para nuestros clientes, en hacer coches accesibles para la mayor cantidad de gente posible", explica Jackson a
La británica (Coventry, 1959) lleva las riendas de Citroën desde junio de 2014 y es consciente de que el futuro solo puede ser "verde".
"Respondemos a lo que pasa en el entorno, y cada vez más gente se asegura de que protegemos nuestro planeta y de que tenemos que reducir nuestras emisiones de CO2. Eso significa tener coches eléctricos, pero también asegurarnos de que los de diesel y gasolina son los más limpios", indica.
Jackson sí precisa que la implantación del coche eléctrico, sin embargo, no está solo en sus manos: "Para 2030 puede que el 25 % o el 10 % de nuestros coches, quién sabe, serán eléctricos, pero creo que no dependerá necesariamente de los coches, sino de la infraestructura, de cómo de fácil sea cargarlos en un viaje o en casa".
El futuro también pasa por los coches autónomos. De momento, el 19-19 Concept, presentado en mayo, permitirá al conductor delegar la conducción en autopista o atascos.
"Todavía queda mucho para coches completamente autónomos. Diría que hasta 2030 o así, aunque hay que recordar que muchos elementos que ya tenemos nos ayudan a conducir seguros. Tendremos que esperar, aunque, para ser honesta, a mí me gusta conducir, espero que no lleguemos ahí ya", dice.
La curiosidad con la que los viandantes se acercan estos días a ese modelo o al Ami One Concept, su última visión en favor de la movilidad urbana, está a la par con la nostalgia con la que miraban antecesores históricos como el 2 CV (dos caballos) o el B12, cuya principal innovación fue incorporar frenos en las cuatro ruedas.
"Actualmente no se trata solo del coche, del producto, sino de proveer una experiencia. Citroën trata de hacer la vida de nuestros clientes más fácil. Las marcas seguirán siendo importantes siempre y cuando recuerden eso", señala Jackson.
Esa ambición no se pone fronteras. PSA oficializó en abril su entrada en el mercado indio con el lanzamiento el próximo año de su modelo C5 Aircross.
"Siempre estamos buscando nuevos mercados. El sureste asiático, la India... y también tenemos que asegurarnos de que nos mantenemos fuertes en nuestros mercados, como Europa o América Latina. Queremos tener un portafolio equilibrado de mercados porque este mundo es caótico", sostiene.
Europa es de momento su punto fuerte. Las ventas de Citroën en el primer trimestre de este año avanzaron allí un 4,5 % interanual, frente a caídas del 16 % en Latinoamérica o del 56,7 % en China y el sureste asiático. EFECOM