Madrid, 21 jun (EFECOM).- La Bolsa española subió el 0,36 % esta semana, condicionada por los máximos históricos de Wall Street y los mensajes del Banco Central Europeo (BCE) y la Reserva Federal estadounidense (FED), dispuestos a bajar los tipos de interés y a aplicar otras medidas monetarias expansivas si continúa empeorando la actividad económica.
El principal indicador del mercado nacional, el IBEX 35, terminó este período en 9.227,2 puntos después de subir el viernes 18,7 puntos, el 0,2 %. En el año acumula una revalorización del 8,05 %.
Los comentarios vertidos en estos días por los presidentes del BCE, Mario Draghi, y de la FED, Jerome Powell, desencadenaron reacciones dispares en los mercados financieros y en las bolsas.
Por un lado fomentaron las compras de deuda, y la rentabilidad del bono español a largo plazo caía el jueves hasta el mínimo histórico del 0,389 %.
A esa tendencia también contribuyeron algunas noticias económicas que confirmaban la desaceleración económica, como la caída de la confianza inversora (índice Zew) en Alemania y en la zona euro; la bajada de la inflación en mayo en cinco décimas, hasta el 1,2 %, en esa área económica, o la caída de la actividad manufacturera en los Estados Unidos, al borde de la recesión según el dato adelantado de junio.
Además, la cotización del oro ascendía a máximos de seis años al rozar hoy la onza el precio de 1.400 dólares, a lo que ayudaba la depreciación del dólar. El euros subía a 1,13 dólares.
La cotización del barril de petróleo Brent también contribuyó en parte a la subida semanal después de encarecerse tres dólares esta semana, el 5 %, hasta 65 dólares, por el derribo de un dron estadounidense por Irán y la disposición del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, a atacar ese país.
Las palabras de los banqueros centrales beneficiaron inicialmente a las empresas más endeudadas, como las energéticas y Telefónica, y perjudicaron a los bancos más sensibles a los tipos de interés y con el negocio menos diversificado geográficamente.
Así, Bankia, con escasas perspectivas de fusión a la vista, ha cedido el 4,71 % en este período, la segunda mayor caída del IBEX, y su cotización se ha situado en niveles de 2016. Por su parte, Caixabank cedió el 4,38 %, la tercera mayor bajada del IBEX; Bankinter cayó el 3,31 % y Banco Sabadell el 1,957 %.
La Bolsa española aprovechó para subir en la última jornada de esta semana los máximos histórico que lograba Wall Street (el índice Dow Jones de Industriales avanzaba hasta 26.907 puntos y el S&P 500 a 2.964), el parqué nacional subía al compensar la caída de la banca con el avance del sector energético.
En cuanto a la evolución semanal de los grandes valores, Repsol subió el 5,81 %, el mayor avance semanal del IBEX, mientras el barril de petróleo se encarecía el 5 % en este ciclo, en tanto que Inditex ganó el 1,88 %; Banco Santander el 1,16 %; BBVA el 0,8 %; y Telefónica el 0,3 %. Iberdrola perdió el 0,09 %.
Después de Repsol, la mayor subida semanal del IBEX, que a partir del lunes incorpora a Masmóvil en sustitución de Técnicas Reunidas, correspondió a Cellnex, el 5,8 %, en tanto que Cie Automotive avanzó el 5,67 % y ArcelorMittal el 4,26 %, por los anuncios de Trump respecto a la reunión que mantendrá con las autoridades chinas en la reunión del G-20 del próximo fin de semana.
En el lado contrario, se situó Indra, que perdió el 8,77 % después de anunciar la compra de ITP. Aparte de los bancos también destacó la caída del 3,93 % de Acciona y el 3,2 % de Meliá Hotels.
En cuanto al resultado de los grandes valores este viernes, Inditex subió el 2,17 %; Repsol el 1,48 % e Iberdrola el 0,52 %. Bajaron Telefónica, el 0,81 %; BBVA el 0,44 % y Banco Santander el 0,34 %. Ence lideró las subidas del IBEX al ganar el 6,26 % y Acciona las pérdidas con una caída del 2,34 %.