Madrid, 25 jun (EFECOM).- Los representantes de los trabajadores de Alcoa de las plantas de A Coruña y Avilés han llegado a un acuerdo respecto al plan industrial de Parter Capital para las factorías, al comprometerse el fondo suizo a ampliar las garantías de empleo más allá de los dos años, si se cumplen ciertos hitos del plan.
Según han explicado a Efe fuentes conocedoras de la reunión que ha habido esta tarde, al finalizar los dos años habrá 250 trabajadores empleados en cada una de las factorías, es decir quinientos sobre los 686 que emplean en total en la actualidad.
Ello no supone, según las citadas fuentes, una reducción de la plantilla, sino que sería la cifra que quedaría, con el cálculo que han hecho de jubilaciones, prejubilaciones y otras salidas que se puedan producir en esos veinticuatro meses.
No obstante, el fondo suizo no descarta que esa cifra de 250 empleados por fábrica pueda elevarse al término de esos dos años, si finalmente se arrancan las series de electrolisis de aluminio primario que se pararon con motivo del expediente de regulación de empleo (ERE) que Alcoa aprobó para las dos plantas.
Mañana, miércoles, se reunirán de nuevo los comités de empresa de las dos factorías con Alcoa, una reunión en que, según las citadas fuentes, la representación de los trabajadores se daría por enterada de la venta por la multinacional del aluminio de las fábricas a Parter Capital.
El fondo suizo fue el elegido por Alcoa para vender la fábrica, ya que su oferta garantiza el mantenimiento del cien por cien de los empleos durante los primeros dos años transcurridos desde la venta, mantenía las capacidades productivas y daba una solución integral para las dos plantas.
La otra oferta que había era la del fondo alemán Quantum que inicialmente sólo presentó oferta por la planta de Avilés y, aunque luego anunció otra que incluía también la de A Coruña, no fue tenida en consideración, al haber adoptado ya Alcoa su decisión.
Además, la oferta de Parter Capital incluye la posibilidad de que las series de electrolisis que se pararon pudieran ser rearrancadas si se dan una serie de condiciones, algo que excluía Quantum, que los descartaba y que planteaba hacer en la fábrica de Avilés un centro de reciclado de aluminio.