Barcelona, 26 jun (EFECOM).- La tasa de ahorro de las familias españolas ha caído hasta nueve puntos en la última década, pasando de entre un 12 y un 13 % en 2008, fecha en la que se desencadenó la crisis financiera global, hasta el 4 % en 2018, según un estudio de la consultora Mercer Investments, encargado por Esade.

El nivel de ahorro de los españoles se situó en 2018 en mínimos históricos "muy inferiores a la zona euro", que ha mantenido una tasa de ahorro del 12 %, un fenómeno que se explica por la destrucción de empleos durante la crisis y la precariedad laboral, algo que ha dificultado el ahorro a través de planes de pensiones.

El estudio, presentado este miércoles por la profesora de Esade Carmen Ansótegui y el director de Mercer Investments, Xavier Bellavista, analiza a lo largo del período 2008-2018 las tendencias del ahorro colectivo en España y compara la evolución de los fondos de pensiones de empleo, individuales y los fondos de inversión.

En España, según detalla el informe, el 41 % de los activos financieros se concentran en depósitos bancarios, lo que supone 881.000 millones de euros, mientras que el resto se distribuyen en inversiones directas (26 %), instituciones de inversión colectiva (14 %), seguros (11 %) y fondos de pensiones (5 %).

Estos datos muestran el "poco peso" de los fondos de pensiones españoles a nivel de ahorro, al gestionar solamente 114.000 millones de euros del total de activos financieros en el país.

A la hora de analizar el estado de los ahorros en España a través de los fondos de pensiones de empleo, individuales y fondos de inversión, el estudio ha trabajado con una muestra de más de 1.300 fondos, con un patrimonio acumulado entre los tres tipos, a fecha del 31 de diciembre de 2018, de más de 350.000 millones de euros.

Una de las primeras conclusiones que ha extraído el estudio encargado por Esade es que los fondos de pensiones de empleo tienen una tasa de rentabilidad "significativamente superior" (3,6 %) a la de los fondos de inversión y de pensiones individuales, cuya rentabilidad se sitúa en el 2,2 y el 2,5 % respectivamente.

Uno de los motivos que favorece la rentabilidad de los planes de pensiones de empleo, ha explicado la profesora Carmen Ansótegui, es que este tipo de planes se encuentran regulados por comisiones de control y estructuras de gobernanza que favorecen estrategias de inversión más eficientes a largo plazo.

Otro dato que destaca el estudio en sus conclusiones es que el 25 % de los fondos de inversión en España concentran el 80 % de los activos financieros dedicados a esta actividad, y, según Ansótegui, es indicativo de que existe una concentración del mercado en grandes grupos con alta rentabilidad, debido al volumen de capital manejado.