Alba Santandreu
La empresa brasileña de energía Neoenergia, controlada por Iberdrola, se estrenó este lunes en la Bolsa de Sao Paulo con una subida del 7,7 %, hasta los 16,86 reales (3,92 euros) por acción, aunque llegó a escalar más de un 10 % pocos minutos después del inicio de sesión.
Ese es el valor oficial de inicio recogido por la Bolsa de Sao Paulo, aunque el primer precio de preapertura visible registrado en el parqué brasileño había sido ligeramente inferior, de 16,52 reales (3,84 euros).
De esa forma, Neoenergia alcanzó un valor de mercado de 20.451 millones de reales ( 4.756 millones de euros) en los primeros minutos de cotización bursátil.
Tres horas después del inició de la sesión, el precio de la acción se situaba estable, en 16,92 reales (3,93 euros), con subida del 7,79 %,
No obstante, llegó a tocar un máximo de 17,25 reales (4,01 euros) poco minutos después del toque de campana virtual, el cual vino acompañado de una lluvia de confetis y la canción "Aquarela do Brasil" en la voz de Gal Costa.
En total, fueron ofrecidas 208 millones de acciones, que representan el 17,13 % del capital de Neoenergia, compañía formada en 2017 tras la fusión de esta empresa con Elektro, ambas participadas por Iberdrola.
El director general de Neoenergia, Mario Ruiz-Tagle, valoró la salida a bolsa y señaló que la operación demuestra la "confianza del mercado de capitales en la gestión de la empresa".
"Los inversores internacionales tienen mucho interés en venir a Brasil. Tenemos que hacer las cosas bien para capturar su interés y la muestra es Neoenergia", comentó Ruiz-Tagle en declaraciones a los periodistas en Sao Paulo.
La eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán puso a la venta un paquete de 29,7 millones de acciones y mantuvo el control con el 50 % del capital más una acción.
El estatal Banco do Brasil, por su parte, ofreció toda su participación, del 9,34 % (113,4 millones de títulos), mientras que el fondo de pensiones Previ vendió un total de 64,9 millones de títulos y se quedó con el 32,9 % de participación, manteniéndose como accionista relevante.
Ruiz-Tagle explicó que la salida de Banco do Brasil supone "un paso mas en la evolución natural de la Neoenergia" y no va a cambiar la estrategia de la empresa, que tiene previsto invertir unos 6.500 millones de euros en los próximos cinco años en el país sudamericano.
La salida a bolsa de este lunes se produce tras el intento frustrado de 2017, cuando la brasileña suspendió la operación porque los potenciales inversores no estaban dispuestos a pagar los precios a los que se ofertaban sus acciones.
Entonces, la horquilla oscilaba entre los 15,02 y 18,52 reales (entre 3,44 y 4,24 euros).
Tras la operación de este lunes, la compañía comenzó a cotizar en el segmento "Novo Mercado" de la Bolsa de Sao Paulo, que reúne a las empresas con mayor transparencia corporativa en el país suramericano.
La operación representa la segunda y mayor colocación de este tipo en Brasil en lo que va de año y es la más relevante en el sector energético brasileño desde el año 2000.
"Brasil es indudablemente uno de los puntales del crecimiento del grupo Iberdrola", subrayó Galán.
A través de Neoenergia, Iberdrola, presente en Brasil desde 1997, se ha convertido en una de las dos mayores eléctricas de Brasil, con 13,9 millones de puntos de suministro que atienden a 34 millones de brasileños.
La compañía cuenta con una capacidad de producción de más de 3.700 MW, de los cuales casi el 86 % son renovables, y posee casi 700.000 kilómetros de líneas eléctricas, operadas por sus distribuidoras Cosern, Celpe, Coelba y Elektro.
"Neoenergia continuará trabajando para generar riqueza en Brasil, donde estamos presentes en 18 Estados, y para dar el mejor servicio a nuestros 34 millones de clientes brasileños", señaló el presidente de Iberdrola.