El sector turístico español afronta con moderado optimismo la temporada de verano en la que espera una evolución positiva en los destinos vacacionales más dependientes de la demanda española y en las ciudades, frente a caídas en las zonas de sol y playa más condicionadas por el turismo extranjero.
Según la Alianza para la Excelencia Turística, Exceltur, en el tercer trimestre del año seguirá consolidándose la tendencia de ralentización del consumo turístico extranjero -iniciada en el arranque de 2018- básicamente por la recuperación de los destinos competidores.
Barcelona, Madrid y Valencia, junto a los destinos del interior (las dos Castillas y Navarra), el litoral catalán, Asturias y Galicia presentan las mejores perspectivas para el verano, mientras que Canarias y Baleares descuentan nuevas caídas generalizadas en sus ventas y resultados, al ser improbable que la demanda española pueda compensar el descenso de la extranjera, ha señalado este jueves el vicepresidente ejecutivo de Exceltur, José Luis Zoreda.