Sídney (Australia), 17 jul (EFECOM).- La plataforma de reparto de comida Uber Eats se comprometió a modificar los contratos "injustos" que obligaban a los restaurantes de Australia a asumir la responsabilidad por la entrega de los pedidos cuando estos ya estaban fuera de su control.
La Comisión Australiana de Competencia y Consumo (ACCC, en inglés), que investigó a Uber Eats, explicó hoy que al menos desde 2016 los contratos de la plataforma hacían que los restaurantes asumieran los costes derivados de los problemas generados desde el momento en el que los pedidos salían de sus locales.
Si bien el cliente de Uber Eats tiene derecho a una devolución, la cantidad deducida se descontaba de los pagos destinados a los restaurantes, al margen de quien tuviese la responsabilidad de los problemas vinculados al encargo.
"Consideramos estos términos injustos porque parecen causar un desequilibrio significativo entre los restaurantes y Uber Eats; los términos no son razonablemente necesarios para proteger a Uber Eats y pueden ir en detrimento de los restaurantes", dijo el presidente de ACCC, Rod Sims, en un comunicado.
Tras la investigación, Uber Eats, que entró al mercado australiano en 2016, se comprometió a enmendar los términos del contrato para aclarar que los restaurantes solo serán responsables por asuntos que estén bajo su control como la entrega de órdenes equivocadas o incompleta.