El grupo francés de gran distribución Carrefour perdió 399 millones de euros en el primer semestre de 2019, un 53,6 % menos que en el mismo periodo del pasado año, cuando se dejó 861 millones.
La facturación a tasa de cambio constante se situó en los 38.793 millones, un alza del 2,1 % frente al primer semestre de 2018.
Sin los impactos extraordinarios de impuestos, de refinanciación de la deuda y del resultado neto de las actividades abandonadas, principalmente en China, Carrefour se apuntó ganancias semestrales de 179 millones, frente a los 135 del primer semestre de 2018.
Mientras, el ebitda del grupo se estableció en 1.311 millones, un margen estable del 3,8 %.
El gigante de la distribución apuntó que en España desarrolló acciones estratégicas como el refuerzo del negocio digital, del bio o de los productos frescos y de marca Carrefour, todo ello apuntalado por el nombramiento de Rami Baitiéh como director ejecutivo de la compañía en España en sustitución de Eric Uzan.
El mercado se mantuvo como el segundo más importante de Carrefour en Europa, tras Francia, con unas ventas de 2.317 millones, prácticamente estables.
Mientras, en América Latina, el grupo registró un crecimiento de ventas del 15,2 % en comparable, lo que "reflejó la sólida dinámica comercial".
Ese buen desempeño se notó tanto en Brasil, principal mercado de la compañía en América Latina, con un aumento de las ventas del 12,9 % a cambio constante (3.471 millones), como en Argentina, que experimentó un crecimiento del 50,5 %, hasta los 595 millones.