El grupo industrial estadounidense 3M anunció este jueves que en el primer semestre del año ha ganado 2.018 millones de dólares, un 18 % menos interanual, debido especialmente a un descenso en las ventas en los últimos tres meses en casi todos sus mercados.
3M, conocido popularmente por sus materiales de oficina, entre ellos los pósit ("Post-it"), abarca también los sectores de automoción, electrónico y de la alimentación, y es una de las treinta firmas que integran el Dow Jones de Industriales.
La multinacional con sede en Maplewood (Minnesota) informó de que en el segundo trimestre del año el grupo 3M redujo sus ganancias un 39 %, hasta 1.127 millones (1,92 dólares por acción).
Su beneficio por acción hasta junio fue de 3,44 dólares, frente a los 4,04 dólares del mismo tramo de 2018, y su facturación de la primera mitad se situó en 16.034 millones, un 3,8 % menos.
Las ventas del grupo entre abril y junio se redujeron ligeramente, un 2,6 %, hasta 8.171 millones.
3M explicó en una nota que su negocio dedicado a la Salud fue el único con crecimiento de ventas (5,8 %), mientras que bajaron en las áreas de Consumidor (-0,5 %), Transporte y Electrónica (-2,9 %) y especialmente en Seguridad e Industrial (-9 %).
Geográficamente, las ventas solo crecieron en Estados Unidos, un 1,7 %, con el mayor retroceso en el conjunto de Europa, Medio Oriente y África (-9,4 %), seguido por Asia-Pacífico (-3,5 %) y por Latinoamérica y Canadá (-2,9 %).
El máximo ejecutivo de 3M, Mike Roman, destacó los resultados de la firma, teniendo en cuenta "las condiciones de lento crecimiento en mercados clave", y señaló que se han gestionado los costes y mejorado el flujo de caja.
Asimismo, la firma informó de que ha actualizado sus estimaciones de ganancias anuales a la baja para reflejar el cese de las operaciones de su subsidiaria en Venezuela, que ha restado 28 centavos por acción en el segundo trimestre.
Pese a estas dificultades, la compañía mantuvo sus previsiones de negocio ajustadas para el conjunto del año y superó las expectativas de los analistas en cuanto a beneficios e ingresos trimestrales, ya que se esperaban peores.