El Departamento del Tesoro de EEUU prolongó hoy hasta el próximo 25 de octubre la autorización a un reducido grupo de empresas petroleras, incluida Chevron, para seguir operando en Venezuela tres meses más pese a las sanciones a la compañía estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA).

La decisión permite a las firmas Halliburton, Schlumberger, Baker Hughes, Weatherford International y Chevron seguir cumpliendo con sus operaciones contractuales con PDVSA hasta el 25 de octubre.

Las licencias previas tenían validez hasta mañana, 27 de julio.

El gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, impuso en enero sanciones a la petrolera estatal venezolana, en su campaña de presión contra el Gobierno del presidente Nicolás Maduro.

Como consecuencia de ello, PDVSA, que gestiona la principal fuente de ingresos de Venezuela, tiene bloqueados todos sus activos bajo jurisdicción estadounidense, con la idea de traspasarlos a un nuevo Gobierno venezolano una vez que Maduro abandone el poder.

No obstante, Washington emitió licencias especiales para que estas compañías energéticas estadounidenses continuasen sus operaciones de manera temporal.

Chevron es la única gran petrolera estadounidense que se mantiene en Venezuela, donde cuenta con 8.000 empleados.

ExxonMobil y ConocoPhillips abandonaron hace años Venezuela, el país que cuenta con las mayores reservas petrolíferas del mundo, tras la nacionalización del sector decretada por el ya fallecido presidente venezolano Hugo Chávez.

EE.UU. fue el primer país del mundo en reconocer a finales de enero al presidente de la AN, Juan Guaidó, como jefe de Estado interino y, desde entonces, ha tratado de presionar a Maduro con sanciones económicas a su círculo cercano y altos cargos con el fin de que ceda el poder.