Madrid, 29 jul (EFECOM).- Bankia ha ganado 400 millones en la primera mitad del año, un 22,3 % menos, en línea con las expectativas del mercado, y descarta obtener un beneficio de 1.300 millones en 2020 por los tipos de interés negativo, aunque confía en generar los 2.500 millones de capital previstos en su plan.
Hasta el momento acumula un exceso de capital superior a 1.130 millones, por lo que confía en llegar a los 2.500 millones y repartirlos entre sus accionistas mediante un dividendo extraordinario y en efectivo.
A finales de este año, su consejo de administración estudiará el reparto del dividendo que, según ha explicado en rueda de prensa el consejero delegado de Bankia, José Sevilla, podría hacerse con un abono a cuenta, sin esperar a que se hayan generado íntegramente.
A pesar de que el Banco de España reclama una política de dividendos "discreta", el número dos de Bankia defiende que la estrategia de la entidad es "más que prudente" porque su solvencia supera a la del resto de la gran banca.
Sin embargo, los tipos negativos impiden lograr su objetivo de beneficio pues afectan a la rentabilidad. Una subida de 50 puntos básicos en el euríbor, que lo dejaría en el 0,20 %, supondría un incremento de los ingresos de Bankia de 500 millones en un par de años, ha expuesto su director financiero, Leopoldo Alvear.
Mientras el precio del dinero no suba, Bankia ni piensa en fusiones ni en cobrar a los particulares por los depósitos y confía en sacar rédito a su fusión con BMN para obtener mayores ingresos; una vía es mediante el crédito al consumo, que apenas tenía tirón en el antiguo grupo de cajas liderado por Caja Murcia.
En la primera mitad del año, el crédito al consumo de Bankia aumentó un 16,2 %, hasta 1.276 millones, y las hipotecas, un 5,4 %, hasta 1.459 millones, si bien habría crecido un 12 % si en la segunda quincena de junio no se hubiera dado una ralentización tras la entrada en vigor de la nueva ley hipotecaria.
El 58 % de las hipotecas del banco se firman a tipo fijo y a Sevilla le parece acertado si se tiene en cuenta que son préstamos a largo plazo, con una media de más de 20 años.
Bankia aplaude el compromiso del Gobierno de privatizar la entidad pero considera que ahora, por el bajo precio de la acción, no es el momento y piensa que habrá oportunidades antes de finales de 2021.
Si el mercado empieza a anticipar una subida de los tipos, argumenta, se puede abrir una ventana para que el Estado privatice la entidad, en la que creen que lo "deseable" es que haya un Gobierno pronto y sea decidido para ejecutar los planes que necesita.
Sevilla ve "evidente" que la reputación del sector se ve afectada por escándalos como el supuesto espionaje encargado por BBVA al excomisario Villarejo o el fallido intento de fichaje de Andrea Orcel como consejero delegado del Banco Santander.
"La reputación del sector es la suma de la reputación de cada entidad", ha añadido.
En cuanto a las cuentas, la caída del beneficio semestral se explica por las menores operaciones financieras, que cayeron más del 50 %, aunque el negocio puramente bancario llegó a 639 millones, un 0,3 % más, lo que fue celebrado por los inversores en los primeros compases de la sesión.
El margen de intereses se redujo un 2,8 %, pero los ingresos por comisiones se mantuvieron estables, en 533 millones, aunque no evitó que el margen bruto cayera el 9,2 %.
Los gastos de explotación se redujeron más del 3 % y la tasa de morosidad retrocedió al 5,7 %, frente al 8,1 % de un año antes.