Madrid, 31 jul (EFECOM).- La Bolsa española cierra julio con una caída del 2,48 %, el peor registro en este mes desde 2012, en pleno rescate de los bancos españoles, reflejo de las múltiples incertidumbres que atenazan a los inversores, que también están recogiendo beneficios tras las ganancias del primer semestre.
El IBEX ha caído esta jornada 15,60 puntos, el 0,17 %, y se sitúa en 8.971 puntos, incapaz de recuperar los 9.000 que perdió la víspera. En lo que va de año avanza el 5,05 %, menos de la mitad de lo que llegó a subir en Semana Santa.
La caída en julio es la segunda peor desde 2012, cuando el indicador se desplomó un 5,13 % coincidiendo con los momentos más duros del rescate del sistema financiero. Desde entonces todos los julios se han cerrado en positivo, salvo el de 2014.
Entre los elementos que han cotizado este mes destaca la evolución de las políticas monetarias en EEUU -que podría bajar tipos este mismo miércoles- y Europa, que podría hacer lo propio en septiembre, además de las dudas sobre el acuerdo comercial entre Estados Unidos y China o la posibilidad cada vez más cierta de un "brexit" sin acuerdo.
Los mercados esperan para esta tarde el pronunciamiento de la Fed sobre sus tipos de interés, que, según el consenso de los analistas, bajarán al menos un 0,25 % aunque podría llegar al 0,50 %.
El mercado saludó la designación de Christine Lagarde como nueva presidenta del BCE a partir de noviembre porque se presupone que continuará la política acomodaticia de Mario Draghi.
Las grandes perjudicadas por este escenario de tipos a la baja son las entidades financieras, que no consiguen recuperar rentabilidades, razón que explica sus débiles resultados, salvo excepciones, y por la que varios bancos de inversión han revisado a la baja sus precios objetivos.
Todos los valores del sector han terminado el mes con recortes: Bankia (14,22 %) Sabadell (12,95 %), CaixaBank (11,16 %), BBVA (6,26 %), Santander (5,35 %) y Bankinter (3,17 %).
La evolución de los bancos explica casi en exclusiva que el mercado español haya sufrido más que los del resto de Europa, porque aquí tiene más peso el sector bancario (casi un 30 % del índice), aunque también contribuye el desempeño bajista de algunas grandes compañías, como Telefónica, que ha perdido en el mes 4,15 %.
Otro de los temas recurrentes, las negociaciones entre EEUU y China para tratar de cerrar un acuerdo comercial, ha terminado el mes sin ningún avance sustancial y con nuevas andanadas de Donald Trump en Twitter contra Pekín.
Las energéticas no tuvieron tampoco su mejor mes, después de la propuesta de la Comisión Nacional de la Competencia (CNMC) de recortar los peajes por la distribución y el transporte, lo que ha pasado factura sobre todo a Enagás (-12,76 %); Red Eléctrica (-6,63 %), y Naturgy (-5,49 %).
La fallida investidura de Pedro Sánchez apenas ha tenido impacto en las cotizaciones, según diversos analistas.
Al margen de los bancos, los valores más castigados en julio han sido Ence, que pierde el 17 %, Mediaset cede el 16,77 %; Siemens, el 13 % y Enagás Indra y y Acerinox se dejan el 12 % cada uno. La mejor evolución ha sido la de Grifols, que se anota una ganancia del 12,69 % desde final de junio.
Los movimientos, o amagos de movimientos, en la política monetaria, han tenido efectos en el mercado de divisas, con el euro perdiendo posiciones frente al dólar, un 2,3 % en el mes, hasta 1,112 a que se sitúa este miércoles.
La divisa más castigada ha sido la libra estrelina, que ha recortado hasta 1,221 dólares a cierre de los mercados en Europa, en sus niveles más bajos desde hace más de dos años, ante la amenaza de un "brexit" duro.
El precio del Brent ha caído en el mes un 2 %, hasta 65,21 dólares por barril y la deuda española a 10 años se paga al 0,277 % (frente al 0,390 % de inicio de julio), con el bono alemán perforando sus mínimos, hasta el -0,444 % de cierre de este miércoles.