CCOO se ha personado este viernes como acusación particular en la denuncia presentada por la Fiscalía contra siete responsables de Metro de Madrid por poner en grave riesgo la salud de sus empleados al permitirles trabajar expuestos al amianto sin adoptar medidas para manipularlo con seguridad.
La Fiscalía destaca en la denuncia que la exposición prolongada al amianto durante años sin ningún tipo de medida de seguridad ha desembocado en el fallecimiento de dos trabajadores y en la enfermedad profesional de otros dos.
La denuncia del Ministerio Fiscal se ha presentado contra siete responsables de salud y prevención de riesgos laborales de la empresa Metro de Madrid por la presunta comisión de delitos contra los derechos de los trabajadores, homicidio imprudente y lesiones por imprudencia.
CCOO sostiene en un comunicado que algunos de los responsables de Metro de Madrid "ocultaron, durante muchos años, a los trabajadores y a sus representantes legales" la existencia de "muchas piezas con amianto" en los trenes, las máquinas y las instalaciones del suburbano madrileño.
Estas piezas que contenían materiales con amianto fueron manipuladas durante años "sin protección por muchos trabajadores a lo largo de su vida laboral", apunta el sindicato.
CCOO considera que en Metro de Madrid se infringieron de forma "grave" las normas de prevención de riesgos laborales "creando una situación de riesgo para los trabajadores a su servicio a los que permitieron trabajar con materiales con amianto, altamente peligrosos para su vida y salud".
El sindicato opina que es hora de que los máximos responsables de la empresa asuman su responsabilidad sobre esta "grave negligencia", por lo que, desde su punto de vista, la denuncia se debería extender a la dirección de Metro de Madrid, encargada de establecer, dirigir y supervisar la política de la compañía y nombrada "con criterios políticos" desde el Gobierno de la Comunidad de Madrid.
"Nadie puede creer que la dirección desconociera la existencia de amianto en Metro de Madrid y, cuando menos, debería haber exigido a los técnicos de Metro el cumplimiento de las leyes existentes por exposición de trabajadores al amianto", subraya CCOO.
Debería quedar claro en la sentencia de este proceso quiénes fueron los responsables de que Metro de Madrid "ocultara" a sus trabajadores que las piezas que manipulaban contenían amianto, sin que se les facilitara la información ni la formación para trabajar con seguridad con este material, apunta el sindicato.
"No podemos creer que los responsables políticos que han venido gestionando Metro de Madrid durante muchos años no fuesen conocedores de esta situación y también estamos casi seguros de que fueron informados por los responsables de Metro de Madrid que pertenecen o han pertenecido al departamento de Salud y Prevención de Riesgos Laborales", añade la organización sindical.