México, 23 ago (EFECOM).- El estancamiento de la economía mexicana, que registró un crecimiento nulo ( 0 %) en el segundo trimestre del año según datos revelados este viernes, pone en cuestión los pronósticos del presidente del país, Andrés Manuel López Obrador, quien sostiene que el PIB aumentará un 2 % este año.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó de que el producto interior bruto (PIB) tuvo un crecimiento del 0 % en el segundo trimestre del 2019 en comparación con el trimestre anterior, según cifras ajustadas por estacionalidad.
Este dato supone una disminución de una décima sobre el dato preliminar publicado el 31 de julio, cuando se estableció que la economía había crecido un 0,1 %, y confirma la desaceleración económica.
México esquivó por los pelos la recesión tras un primer trimestre en rojo, cuando su PIB se contrajo un 0,2 % respecto último trimestre de 2018.
Aunque el país no se encuentre propiamente en recesión, destacadas voces del Gobierno han admitido que la economía mexicana atraviesa una desaceleración, pero este baño de realidad no es suficiente para López Obrador, quien no mueve ni un ápice su discurso económico.
El mandatario izquierdista, que asumió el poder el 1 de diciembre, dijo este viernes que el dato de incremento nulo no le "preocupa" y mantuvo su pronóstico de alcanzar un crecimiento del 2 % en 2019.
"Sigo igual. Vamos muy bien, muy distinto de lo que piensan los expertos y ya ven que yo soy un poco perseverante", respondió en rueda de prensa a la posibilidad de revisar a la baja su previsión.
López Obrador aprovechó para arremeter contra de los cálculos del Inegi y se mostró partidario de utilizar "otros parámetros de medición", ya que para el Gobierno que encabeza es más prioritario el reparto de la riqueza que el crecimiento económico.
"Sí nos importa el crecimiento pero nos importa más el desarrollo. Crecer es crear riqueza y desarrollar es distribuir riqueza", dijo el mandatario, convencido de que ahora en México "hay más y mejor distribución del ingreso".
Por contra, el gobernador del banco central de México, Alejandro Días de León, alertó este miércoles de que la economía mexicana se ha desacelerado más de lo previsto y ha aumentado la brecha entre su crecimiento potencial y el real.
"Esta desaceleración ha sido mayor a lo que se había anticipado y el entorno externo no ha ayudado", declaró el gobernador del Banco de México en un foro.
En el segundo trimestre, las actividades terciarias avanzaron 0,2 % en tanto que las primarias cayeron 3,4 % y las secundarias un 0,2 % frente a los tres meses anteriores, según cifras desestacionalizadas (sin factores coyunturales por temporada), señaló el organismo en un comunicado.
En cifras originales, el PIB cayó un 0,8 % en el segundo trimestre de 2019 respecto al mismo período del año anterior. Y acumula un crecimiento de apenas 0,2 % en los primeros seis meses.
Alejandro Saldaña, analista económico del Banco Ve por Más, contó a Efe que el principal desacelerador de la economía mexicana es "la debilidad del tejido industrial".
Aunque la caída de la producción de crudo y de la minería se arrastra desde hace una década, contó que el decrecimiento del sector de la construcción se ha "acelerado" durante la actual Administración.
"Creemos que en la segunda mitad del año mejorará la actividad económica", contrastó el analista, quien prevé que el Gobierno acometa una ejecución del gasto público más eficiente.
Y es que en el primer semestre del año hubo un subejercicio en el gasto del sector público de 174.000 millones de pesos (unos 8.796 millones de dólares) presupuestados y no gastados, algo habitual en el arranque de un nuevo gobierno.
Los expertos consideran que la estabilidad en el consumo y el incremento de remesas son factores que facilitarán el repunte económico en el segundo semestre, aunque hay riesgos que puedan lastrarlo, como una eventual imposición arancelaria por parte de Estados Unidos.
No obstante, la mayoría de analistas han reducido las perspectivas económicas para México a lo largo del año y actualmente sitúan el crecimiento para 2019 en torno al 1 %, lejos del 2 % propugnado por el presidente.
"El pronóstico de López Obrador es muy poco probable. Tendríamos que ver dos trimestres extraordinarios y no parece que vaya a ser así", dijo Saldaña.
El Gobierno mexicano anunció el pasado 30 de julio un plan para movilizar 485.000 millones de pesos (unos 21.8797 millones de euros) para apoyar la economía e incentivar el consumo, una decisión que fue bien vista por buena parte del empresariado.
El ajuste a la baja del PIB está teniendo impacto en los mercados. A media sesión, la Bolsa Mexicana de Valores perdía 193,66 puntos -un 0,48 %- y se situaba en 39.950,58 puntos.
Y en el mercado cambiario el peso también se resintió. Si este jueves se cotizaba a 19,77 unidades por dólar a la venta en el interbancario, hoy cerró en 19,87 pesos por billete verde, lo que implica que el dólar se apreció en un 0,51 %.