La familia Berlusconi se ha asegurado este miércoles el voto favorable en la junta de accionistas de Mediaset Italia que se pronunciará sobre la fusión con su filial española, pues en la reunión de Milán está presente el 62,5 % del capital y Fininvest, de Berlusconi, tiene el 44,18 % del capital.
Mediaset Italia y España votan este miércoles en sendas asambleas de socios si se fusionan para crear el gigante audiovisual paneuropeo MediaForEurope (MFE), operación que necesita una mayoría de dos tercios de los asistentes en el caso de Mediaset Italia y mayoría simple en España.
Fininvest con el 44,18 % del capital y el 45,8 % de los derechos de voto tiene asegurado el éxito, ya que a la cita en Milán ha acudido el equivalente al 62,5 %.
Entre ellos se encuentra la empresa francesa Vivendi, que tiene el 28,8 % de Mediaset Italia, pero solo el 9,99 % de derechos de voto directos, pues el resto está en manos del fideicomiso Simon Fiduciaria por orden de los reguladores italianos, que se ampararon en 2017 en preocupaciones antimonopolio ya que también tiene el 23,94 % de Telecom Italia.
El grupo de Berlusconi vetó el 18 de abril pasado el derecho de Vivendi de participar en las juntas de accionistas porque consideró que tiene "un comportamiento desleal", después de que se retirara en 2016 de un acuerdo de compra del canal privado Mediaset Premium y se hiciera con un tercio del grupo italiano.
Vivendi recurrió esta decisión ante la Justicia italiana, que le ha concedido votar solo por el equivalente al 9,99 %, si bien no ha admitido los derechos del fideicomiso.
El Consejo de Administración de Mediaset Italia podría haber aceptado este miércoles a Simon Fiduciaria, pero antes de que comenzara la junta, como era previsible, se ha opuesto a que pueda votar e incluso ha vetado su acceso a la asamblea.
Este fideicomiso ya avanzó el lunes que se reservaba el derecho a actuar si no se le permitía participar en la cita de este miércoles, si bien no dio detalles de cómo pensaba hacerlo.
Vivendi ya ha adelantado que votará en contra, pero, con solo su 9,99 %, no podrá poner en riesgo la operación, aunque podrá jugar otra baza, ya que el grupo Mediaset ha previsto que los accionistas de la matriz italiana que no se sumen a esta operación reciban 2,770 euros por cada acción y 6,5444 euros en el caso de Mediaset España, con la condición de que el efectivo que se les pague no exceda 180 millones de euros.
Vivendi, con su participación total del 28,8 % del capital de Mediaset Italia, podría ejercer su derecho de oposición y obligar al grupo a pagarle hasta 900 millones de euros, por lo que Mediaset se vería obligado a buscar a otro socio que adquiera estas acciones para poder seguir adelante.