Pekín, 5 sep (EFECOM).- Los equipos negociadores de China y Estados Unidos se reunirán a principios de octubre en Washington para seguir buscando una solución a la guerra comercial que enfrenta a ambas potencias desde principios del pasado año, informó hoy el Ministerio de Comercio del país asiático en un breve comunicado.
"Las dos partes acordaron mantener la decimotercera ronda de negociaciones económicas y comerciales de alto nivel entre China y EE. UU. en Washington a principios de octubre, tras lo que ambas partes estarán en contacto constante", indica el texto.
"El equipo de trabajo -agrega- realizará reuniones en profundidad a mediados de septiembre para prepararse para un importante progreso de las negociaciones de alto nivel. Ambas partes acordaron que deberían trabajar juntas y poner en marcha acciones prácticas para crear las condiciones favorables para las negociaciones".
El acuerdo para esta nueva ronda de negociación, llega tras una nueva llamada telefónica entre las partes, según la fuente.
En la conversación telefónica participaron el viceprimer ministro chino y líder negociador de los asiáticos, Liu He, el ministro de Comercio, Zhong Shan, el gobernador del Banco Popular de China (el banco central), Yi Gang, y el subdirector de la Comisión Nacional de Reforma y Desarrollo, Ning Jizhen.
Del lado estadounidense, participaron el secretario del Tesoro de EEu. UU., Steven Mnuchin, y el representante de Comercio Wright Heze.
Se trata del primer contacto del que se tiene constancia desde que el pasado domingo entraran en vigor los nuevos aranceles tanto chinos como estadounidenses a las importaciones del país rival.
La guerra comercial entre EE.UU. y China, desencadenada por el agresivo proteccionismo de Trump desde su llegada al poder en enero de 2017, alcanzó su punto álgido en mayo, con la imposición de un arancel del 25 % a importaciones chinas por valor de 250.000 millones de dólares, casi la mitad del total.
A ello respondió Pekín con la aplicación de gravámenes similares a 110.000 millones de dólares en importaciones estadounidenses.
Con su guerra comercial, Trump se ha fijado la meta de equilibrar el intercambio comercial entre los dos países, ampliamente favorable a China, pero hasta ahora y pese a la imposición de aranceles ha tenido poco o nulo resultado.