(Actualiza la EC3190 con el cierre de bolsa)
Madrid, 11 sep (EFECOM).- Inditex, dueño de cadenas como Zara o Bershka, ganó en su primer semestre fiscal (febrero a julio) 1.549 millones de euros, el 10 % más que un año antes, mientras que sus ventas avanzaron el 6,6 % y sumaron 12.820 millones, según las cuentas del grupo, que prevé un fuerte crecimiento orgánico en 2019.
Tras presentar unos números ligeramente por debajo de los esperados por los analistas, la compañía ha cerrado la sesión liderando las caídas del IBEX 35, y tras retroceder un 3,8 % hasta los 27,5 euros. No obstante, en lo que va de año se anota una revalorización del 25 %.
Las ventas comparables (descontados cierres y aperturas) subieron el 5 % y fueron positivas en todas las marcas y zonas geográficas, tanto en tiendas físicas como online, ha destacado su presidente Pablo Isla, en la presentación de resultados a analistas, donde ha asegurado que están contentos con los "niveles de crecimiento".
Para el conjunto del año, el mayor grupo de distribución textil del mundo prevé un crecimiento de entre el 4 y el 6 % en sus ventas comparables, que representaron el 89 % de su facturación total, cuatro puntos más que en el primer semestre del pasado ejercicio.
En lo que respecta al conjunto del año, "esperamos un fuerte crecimiento orgánico" basado en "nuestro modelo diferenciado", ha añadido Isla, quien ha asegurado que su integración total entre las tiendas físicas y la venta online les hace ser únicos y les permitirá aumentar la diferencia con sus competidores.
De vuelta a las cuentas del semestre, el resultado bruto de explotación (ebitda) se disparó el 47,1 %, hasta 3.447 millones de euros, por cambios en la normativa sobre contabilidad de alquileres. Descontado dicho efecto, el aumento sería del 8 %.
El margen bruto, una de las variables que los analistas miran con lupa -mide lo que saca en bruto por cada prenda que vende-, fue de 7.284 millones, superior en el 7 % al de un año antes, y se situó en el 56,8 %, 12 puntos básicos más que en el primer semestre de 2018 pero inferior al del primer trimestre (59,5 %).
Como avance del tercer trimestre, el grupo ha informado de que las ventas a tipos constantes han crecido el 8 % entre el 1 de agosto al 8 de septiembre.
Por zonas geográficas, España aportó en el primer semestre el 15,6 % de las ventas totales del grupo, frente al 16,1 % de un año antes. Asia bajó del 24,5 al 24 %, mientras que Europa subió del 44,2 al 44,4 % y América del 15,2 al 16 %.
Por enseñas, las ventas de Zara y Zara Home crecieron el 7,3 % (8.895 millones de euros); las de Pull&Bear, el 2,6 % (873 millones); las de Massimo Dutti, el 4 % (844 millones); las de Bershka, el 3,3 % (1.080); las de Stradivarius, el 12,4 % (776 millones); las de Oysho, el 3,8 % (301 millones), y las de Uterqüe, el 13 % (52 millones).
El grupo, que apuesta por establecimientos cada vez más grandes en localizaciones prime y la absorción de puntos de venta de menor tamaño o redundantes, efectuó aperturas en 31 mercados y finalizó julio con 7.420 tiendas en 96 países, dos menos que un año antes.
En la presentación a analistas, el director de Relaciones con Inversores, Marcos López, ha restado importancia a la caída en el número de establecimientos y ha subrayado que para ellos la "clave" está en el crecimiento de la superficie comercial (medida en metros cuadrados) y, sobre todo, en su calidad, tanto por ubicación como por imagen y servicios.
Para el analista de GVC Valores Víctor Peiró los resultados del primer semestre deben considerarse "buenos" en un entorno de gran competencia y ha atribuido la caída en Bolsa a la recogida de beneficios por parte de inversores tras las últimas sesiones al alza registradas por Inditex.
"Estos resultados confirman que en 2019 se ha roto con la desaceleración de 2018", ha apuntado el analista de MG Valores Nicolás López, que ha considerado que la caída en Bolsa se debe a que hay inversores que quizá esperaban "aún más" o simplemente a la recogida de beneficios.