La actividad económica de la Eurozona ha seguido deteriorándose en septiembre debido a la intensa desaceleración del sector manufacturero, según indica el Flash del índice PMI Markit, que ha avisado este lunes que el crecimiento del PIB está a punto de paralizarse.
Este indicador que mide la actividad total de la zona euro cayó en septiembre al nivel de los 50,4 puntos, 1,5 puntos de descenso respecto a agosto y muestra el crecimiento de la actividad "más débil" desde junio de 2013.
El economista jefe de Markit, Chris Williamson, ha señalado, en una nota de prensa, que la economía de la zona euro está a punto de paralizarse y que probablemente el crecimiento del PIB sea de apenas un 0,1 % en el tercer trimestre del año.
El índice señala un grave deterioro del sector manufacturero, cuya producción cayó al ritmo más intenso desde 2012, además de que vino acompañado de una ralentización de la actividad del sector servicios.
En septiembre se produjo la primera caída de los nuevos pedidos de productos y servicios desde enero pasado, mientras que los trabajados pendientes bajaron por novena vez en los últimos diez meses debido a la escasez de nuevos pedidos.
Por otra parte, Markit señala que continúa el pesimismo entre las empresas respecto a las perspectivas de los próximos doce meses, que siguen estancadas en uno de los niveles más bajos desde 2012, como consecuencia de la preocupación por la guerra comercial, las tensiones geopolíticas y especialmente por el "brexit".
La encuesta indica que también el volumen de nuevos pedidos recibidos en el sector servicios ha disminuido en septiembre hasta situarse en la segunda reducción más destacada desde 2014, y las expectativas de crecimiento no son optimistas.
Como ejemplo pone a Francia, donde la actividad total se ha ralentizado hasta su mínimo de hace cuatro meses, el sector servicios también se ha desacelerado hasta su menor nivel desde mayo pasado y la actividad manufacturera ha caído por octava vez en los doce últimos meses.