Madrid, 24 sep (EFECOM).- Las peticiones y propuestas de las comunidades autónomas más afectadas por la quiebra de la británica Thomas Cook para hacer frente a sus consecuencias se plantearán en la comisión interministerial de Turismo que el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo ha convocado para los próximos días.
Canarias, Baleares, Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía han enviado este martes a miembros del área de Turismo de sus gobiernos a una reunión encabezada por la ministra de Industria en funciones, Reyes Maroto, a la que han informado de las afecciones concretas de cada zona.
En ella han participado además la patronal hotelera CEAT y las confederaciones de empresarios de estas comunidades, que se sumarán a la interministerial para abordar junto a las administraciones implicadas diferentes medidas para cada territorio, teniendo en cuenta que las cifras oscilan entre ellas.
Así, el director general de Turismo de Cataluña, Octavi Bono, ha cifrado en una rueda de prensa las pérdidas causadas por la caída del turoperador en su comunidad autónoma en 9 millones de euros, aproximadamente, contando con que es una “estimación” hecha en “poco tiempo” y que incluye más factores del mercado.
Además, Bono ha explicado que en el caso de Cataluña el impacto es menor porque en los últimos años se ha realizado un “ejercicio de distribución del riesgo” entre los “operadores de carácter convencional” y las “plataformas de comercialización digital” que han “reducido” las cuotas de Thomas Cook en el territorio.
No obstante, el resto de autonomías participantes no han brindado una cuantía aproximada de las pérdidas y esperarán a la comisión interministerial para tener los números más cerrados, ya que, como han reconocido varios de los representantes, algunas sufren más las consecuencias de la quiebra.
Es el caso de Baleares y Canarias, como han señalado el secretario autonómico de Turismo de la primera, Iago Negueruela, y la consejera de Turismo, Industria y Comercio canaria, Yaiza Castilla.
Castilla ha explicado que en términos de conectividad, Thomas Cook gestionaba un 80 por ciento de los viajes en el archipiélago y su quiebra “supone la mayor crisis turística que pueda haber” en él.
Ha precisado también que la temporada alta en Canarias comienza el próximo 1 de octubre y que las medidas “a corto plazo” son indispensables para “mitigar el impacto negativo” que inflige este acontecimiento en el turismo.
Por ello, en la interministerial pondrá sobre la mesa la necesidad de “valorar la exención de las tasas aéreas” para los trayectos al archipiélago, así como un plan de desarrollo para implantar vuelos adicionales a las islas. Todo con un “carácter conforme a la gravedad de la crisis”.
Negueruela ha añadido que la comunicación con el Gobierno central es “permanente” y que su prioridad también se centrará en “reforzar la conectividad” de las islas, puesto que la “dependencia de la turoperación es clave”, así como resolver la situación de los hoteleros y el importe que les adeuda Thomas Cook.
“Estamos interesados en que la información fluya de manera fuerte entre el ministerio y las comunidades porque de ella dependen la situación de un gran número de turistas y el poder adquisitivo para la comunidad”, ha añadido el secretario general de Turismo de Andalucía, Manuel Muñoz.